La Municipalidad de Ñuñoa tomará cartas en el asunto y oficialmente oficiará al Ministerio de Justicia debido al polémico traslado de un Centro de Reinserción Social (CRS) que se ha instalado sin previo aviso en la comuna, específicamente en la calle José Domingo Cañas. Las autoridades municipales expresaron su descontento, señalando que ni Gendarmería ni el propio ministerio se comunicaron previamente sobre esta instalación, lo que ha generado controversia en la comunidad.

En una reunión acalorada celebrada el 1 de octubre, el municipio expresó su firme malestar por la ubicación del centro en una zona residenciales, lo que dicen, perturba la paz y tranquilidad de los vecinos. Según la declaración oficial, “el emplazamiento del recinto afecta directamente la tranquilidad de las vecinas y vecinos”, revelando que el entorno no está preparado para manejar las externalidades y problemas de seguridad que trae consigo este tipo de servicios.

Ante esta situación, la municipalidad ha decidido tomar medidas enérgicas y notificará al Ministerio de Justicia con la expectativa de revertir esta controvertida decisión. “La decisión impacta negativamente en la calidad de vida de las vecinas y vecinos del barrio”, enfatiza la declaración.

Preocupación entre los vecinos: reportan aumentos en incivilidades y sensación de inseguridad

Los habitantes de Ñuñoa no se han quedado callados. Han reportado un incremento alarmante en la presencia de “incivilidades y una sensación de inseguridad” desde que se instaló el centro de reinserción. Ante esto, el municipio ha reconocido y empatizado con las preocupaciones de la comunidad, comprometiéndose a buscar soluciones efectivas.

“Si bien el municipio no tiene atribuciones para decidir sobre el emplazamiento de los CRS, creemos firmemente que deberíamos haber sido informados a tiempo por las entidades pertinentes”, resalta la declaración oficial. Con esta falta de comunicación, el municipio podría haber considerado alternativas adecuadas en cooperación con el Ministerio de Justicia y Gendarmería.

La municipalidad se ha comprometido a seguir resguardando la calidad de vida de los habitantes de Ñuñoa y a garantizar una “convivencia armónica y segura en los barrios”. En este contexto, han reiterado su intención de utilizar todos los medios a su alcance para lograr que el centro sea reubicado en un lugar más apropiado, donde no interfiera en la paz y seguridad de la comunidad. ¡Los vecinos de Ñuñoa están listos para luchar por su tranquilidad!