Un devastador incendio se desató este viernes en el Hospital Regional de Antofagasta, específicamente en el cuarto piso del edificio, generando pánico entre el personal y familiares de los pacientes.

La Central de Alarmas de Bomberos recibió la llamada de emergencia poco después de las 11 de la mañana, despachando rápidamente varias unidades para controlar la situación. Las brigadas B6, B4, Z3, B5 y Q2 fueron enviadas al lugar, donde se encontraban trabajando en la intersección de Víctor Jara y Azapa.

Después de aproximadamente media hora de intensas labores, los equipos de emergencia lograron controlar las llamas, evitando su propagación a otros sectores críticos del hospital. Sin embargo, se desconoce cuántas personas fueron afectadas o evacuadas durante el siniestro.

El diputado Sebastián Videla no tardó en reaccionar, compartiendo en su cuenta de X un video escalofriante del incendio y denunciando un "caos en el sistema de alarmas, que no habría funcionado como se esperaba”. Su crítica resuena en el contexto de la falta de un protocolo efectivo que pueda prevenir este tipo de situaciones en establecimientos de salud.

Por su parte, Antonio Zapata, director del Hospital Regional, aclaró que el incendio se produjo durante el mantenimiento de un equipo de enfriamiento ubicado en el cuarto piso de la Torre de Unidad de Paciente Crítico. “Como equipo directivo, tomamos la decisión inmediata de evacuar el edificio, así como a todos los pacientes”, explicó Zapata. Actualmente, se elabora un catastro de la situación dentro del hospital.

Afortunadamente, hasta el momento no se han reportado daños o incidentes graves entre los pacientes. “Los pacientes y sus familiares pueden estar tranquilos. Todos están recibiendo la atención adecuada”, finalizó el director.

Este incidente ha suscitado preocupación en la comunidad sobre la seguridad de los hospitales en la región, generando llamados a realizar revisiones exhaustivas de los protocolos de emergencia y a mejorar la infraestructura de protección. Las autoridades están bajo presión para garantizar que este tipo de incidentes no se repitan en el futuro, asegurando así la vida y bienestar de todos los pacientes.