Los trabajadores de todos los dispositivos de salud mental del sistema público en la región del Bío Bío han decretado un paro indefinido en busca de mejoras laborales y de infraestructura esenciales.

Un total de 350 trabajadores, incluyendo personal de los 4 Centros Comunitarios de Salud Mental Familiar (COSAM) y del hospital de día, han tomado esta decisión contundente. Exigen una homologación de sueldos que elimine las disparidades salariales entre sus pares, y de esta manera, evitar la creación de un sistema de trabajadores de primera y segunda categoría.

Adolfo Becar, presidente de la FENATS del Hospital Regional, expresó: “Hoy en día lo que se está pidiendo es homologar los sueldos de los trabajadores. No es justo que existan diferencias significativas cuando todos cumplen la misma función y están comprometidos con el bienestar de los pacientes.”

Por otro lado, Ricardo Alarcón, psicólogo del COSAM Leonor Mascayano, hizo hincapié en las necesidades de infraestructura, mencionando que algunas instalaciones están en condiciones críticas que afectan la atención adecuada a los pacientes.

El director del Servicio de Salud Concepción, Víctor Valenzuela, reconoció la relevancia de las demandas y aseguró que están trabajando en conjunto con los funcionarios para dar respuesta a los problemas planteados. Mientras tanto, el paro continúa y solo se están entregando recetas médicas en situaciones emergentes.

Los pacientes, a pesar de las dificultades, aún tienen la posibilidad de agendar horas médicas, aunque deben enfrentar largos tiempos de espera. Este paro pone de manifiesto la urgentísima necesidad de avanzar en mejoras que beneficien tanto a los trabajadores como a los usuarios del sistema de salud mental en la región.

La situación ha generado preocupación en la comunidad, y muchos se preguntan cómo impactará esto en la atención a los pacientes más vulnerables. Se espera que las negociaciones avancen rápidamente para resolver este conflicto que afecta a tantos.