Las declaraciones recientes del diputado y candidato presidencial de la Democracia Cristiana, Alberto Undurraga, han desatado un torbellino de reacciones en el ámbito político chileno. Este domingo, Undurraga afirmó que, si no logra convencer a los partidos del Socialismo Democrático para participar en primarias sin el Frente Amplio y el Partido Comunista, podría decidir presentarse directamente a la primera vuelta en noviembre.

Esta postura ha generado preocupación en ciertos sectores de la falange, quienes reconocen la volatilidad de la realidad política actual. El diputado Eric Aedo hizo hincapié en la importancia de mantener una visión realista y flexible ante los constantes cambios que enfrenta el panorama político. "La Democracia Cristiana deberá estar atenta a cómo evoluciona la situación y estar preparada para tomar decisiones oportunas," aseguró Aedo.

Además, subrayó que la DC no puede permitirse el lujo de caminar sola en una elección parlamentaria, dado que en un proceso anterior, esta estrategia resultó en un desastroso cero en la elección de convencionales. En este contexto, el diputado hizo un llamado a priorizar el pragmatismo y a adaptarse a las circunstancias, destacando la necesidad de buscar una unidad con otros partidos, especialmente con el PPD y el PS, para que la DC pueda competir con fuerza en las próximas elecciones.

En medio de esta incertidumbre, el debate sobre el futuro de la Democracia Cristiana se intensifica. ¿Logrará Undurraga convencer a sus aliados o se verá obligado a enfrentarse solo a las urnas? La presión está sobre la mesa, y los próximos días serán cruciales para el destino de la DC en el actual clima político chileno.