
¡Alerta! Los grandes bebedores podrían vivir 13 años menos que los abstemios
2025-04-13
Autor: Emilia
Un hallazgo alarmante sobre el consumo de alcohol
Un nuevo estudio de la Universidad de Sao Paulo (Brasil) ha revelado que quienes consumen ocho o más copas de alcohol a la semana enfrentan un riesgo significativo de muerte prematura, acortando su vida hasta 13 años en comparación con los que nunca han consumido alcohol.
Efectos devastadores en el cerebro
Los investigadores han identificado un tipo de daño cerebral, conocido como arteriosclerosis hialina, que afecta la memoria y el pensamiento de los bebedores excesivos. Aunque el estudio no establece una relación de causa y efecto directa, sí revela una fuerte asociación entre el consumo de alcohol en exceso y graves lesiones cerebrales.
Las estadísticas no mienten
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el alcohol está relacionado con más de 200 enfermedades y afecta a cerca de 400 millones de personas en todo el mundo, de las cuales 209 millones son dependientes. En España, la situación es crítica, posicionándose como uno de los países con mayor consumo de alcohol en la Unión Europea.
Datos sorprendentes sobre el consumo en España
Un 74.6% de los hombres mayores de 15 años en España ha consumido alcohol en el último año, con el grupo de edades de 25 a 34 años destacándose como el más afectado. Este consumo excesivo no solo es preocupante, sino que plantea serios retos para la salud pública.
Resultados impactantes del estudio
El estudio, que analizó a 1,781 personas con una edad promedio de 75 años, mostró que los bebedores empedernidos tenían un 133% más de probabilidades de sufrir lesiones cerebrales que los que nunca bebían. Los ex consumidores también corrían un alto riesgo, con un 89% más de probabilidad de daño cerebral.
Un llamado a la conciencia sobre la salud cerebral
Lo más inquietante es la correlación entre el alto consumo de alcohol y los marcadores de neurodegeneración, como los ovillos de tau, vinculados con la enfermedad de Alzheimer. La investigación subraya la necesidad urgente de abordar estos efectos negativos en la salud pública. Así lo enfatiza Alberto Fernando Oliveira Justo, investigador principal del estudio: "Comprender estos efectos es crucial para la salud pública".