
¡Asombroso! Un robot chino revela que la cara oculta de la Luna es aún más seca de lo que pensábamos
2025-04-09
Autor: Sofía
Un gran hito de la misión Chang’e-6
El 25 de junio de 2024, China sorprendió al mundo con un monumental logro espacial: trajo a la Tierra las primeras muestras recolectadas de la misteriosa cara oculta de la Luna. La sonda robótica de la misión Chang’e-6 excavó el suelo lunar, recogiendo casi dos kilos de material en la asombrosa Cuenca Aitken, un cráter de 4.000 millones de años de antigüedad que esconde secretos fascinantes, incluida la posibilidad de agua helada.
¿Cuánta agua hay realmente en la cara oculta?
El análisis de estas muestras ha brindado a los científicos la oportunidad única de examinar el manto lunar en una región hasta ahora inexplorada. El estudio de la presencia de agua es crucial no solo para entender la formación y evolución de nuestro satélite, sino también para sentar las bases de futuras misiones tripuladas y posibles colonias en la Luna, donde los astronautas podrían residir por períodos prolongados.
Un agua más escasa de lo esperado
A pesar de que en las últimas dos décadas ha crecido la comprensión sobre la presencia de agua en la Luna, la investigación dirigida por el científico Sen Hu, del Instituto de Geología y Geofísica de la Academia de Ciencias de China, ha revelado un dato sorprendente: la abundancia de agua en la Cuenca Aitken es de entre 1 y 1.5 microgramos por gramo, un nivel notablemente más seco comparado con las mediciones de la cara visible de la Luna, que oscilan entre 1 y 200 microgramos por gramo.
Encuentros de mundos en el espacio
Esto plantea interrogantes fascinantes. Además de las muestras de la cara oculta, los científicos también analizan 1.73 kilos de regolito de la cara visible, obtenidas en 2020 durante la misión Chang'e 5, cuya área fue nombrada Oceanus Procellarum (Océano de las Tormentas).
Diferencias en la humedad lunar: ¿por qué?
Jesús Martínez-Frías, experto en Geociencias Planetarias y Astrobiología, sugiere que las discrepancias en el contenido de agua entre las dos caras de la Luna podrían surgir de múltiples factores. Una posible explicación podría radicar en la composición del objeto impactor que generó nuestro satélite en su colisión con la protoTierra, creando variaciones en el agua disponible. Además, los impactos durante miles de millones de años podrían haber contribuido a la volatilización y pérdida de volátiles de manera no uniforme. Por último, también se considera la interacción del viento solar con el oxígeno en los materiales del regolito lunar.
Conclusiones que marcan el futuro
A medida que avanza la exploración lunar, estos hallazgos proporcionan un sinfín de oportunidades para futuras investigaciones y misiones. La cara oculta de la Luna continúa desvelando sus misterios, recordándonos que aún queda mucho por descubrir en nuestro fascinante satélite.