Tras el tercer rechazo al polémico proyecto minero-portuario Dominga, el comité de ministros decidió convocar a una sesión extraordinaria en el Auditorio Municipal de Coquimbo. Este evento, que se realizó el pasado jueves por la tarde, tenía como objetivo escuchar las voces tanto a favor como en contra del proyecto.

Sin embargo, la reunión se tornó caótica desde el principio, debido a la presencia de un grupo de manifestantes que apoyaban el proyecto. Estos llegaron con bombos, pancartas y una actitud desafiante, lo que complicó la dinámica del encuentro. A pesar de esta situación, el diputado del Partido Ecologista Verde (PEV), Félix González, permitió su ingreso prometiendo que se mantendría el orden.

A medida que avanzaba la sesión, la tensión fue en aumento. Aunque la discusión continuó, el ambiente se volvió insostenible. Al finalizar el encuentro, el grupo de manifestantes reaccionó violentamente, atacando tanto verbal como físicamente a la seguridad municipal que trataba de despejar la sala.

Se descubrió que esta agrupación estaba constituida por miembros de Faeneros de Chile (FADECHI), y según Gonzalo, estos estarían recibiendo pagos de la empresa Andes Iron, responsable del proyecto Dominga, para entorpecer la sesión. Por su parte, los manifestantes argumentaron que su frustración radicaba en el hecho de no haberse sentido considerados en la conversación, lo que plantea un conflicto aún mayor en la comunidad sobre la aprobación del proyecto.

El Proyecto Dominga ha sido objeto de controversia en Chile desde su concepción, generando un profundo debate sobre sus implicancias ambientales. A medida que avanza el desarrollo del conflicto, las inquietudes de la población siguen aumentando, creando un clima de creciente tensión social alrededor de la minería en la zona.

¿Será este el inicio de una serie de protestas más intensas contra los proyectos mineros en el país? ¡Mantente informado!