Este lunes, la controvertida ministra del Interior, Carolina Tohá, hizo frente a la acusación constitucional presentada en su contra. En un extenso documento de 174 páginas, destacó que la acusación debe ser completamente desechada, argumentando que carece de claridad y está plagada de contradicciones.

Tohá señaló que los hechos imputados son ‘confusos y antojadizos’, y resaltó la falta de un ‘mínimo estándar de fundamentación’. En su defensa, la ministra expone ocho puntos críticos que revelan las debilidades de la acusación:

1. Falta de especificidad:

Los acusadores no logran identificar claramente las acciones que justifican la acusación.

2. Ausencia de fundamentación:

La carga argumentativa es insuficiente.

3. Error en la causalidad:

Se invoca incorrectamente la infracción de la Constitución o de las leyes.

4. Ignorancia del contexto:

No se reconoce adecuadamente la causal de ‘dejar las leyes sin ejecución’.

5. Confusión en la causal de seguridad:

Se malinterpreta lo que implica comprometer gravemente la seguridad nacional.

6. Falta de responsabilidad:

No se le imputa responsabilidad por acciones directas.

7. Desconocimiento de la naturaleza de la acusación:

Los acusadores malinterpretan el carácter excepcional de las acusaciones constitucionales.

8. Mala interpretación de causales:

Erróneamente afirman que las causales son ‘cláusulas abiertas’ con términos jurídicos indeterminados.

Además de sustentar estos puntos, Tohá se defendió haciendo hincapié en su rol en temas de orden y seguridad pública, señalando que tanto el gobierno anterior como el actual han tenido la seguridad como una de sus principales preocupaciones. A pesar de las críticas, explicó que los acusadores omiten mencionar acciones específicas que podrían justificar la acusación en su contra.

La ministra presentó estadísticas impactantes que ilustran la evolución de la situación de seguridad en el país, enfatizando que el número de homicidios ha mostrado un aumento continuo desde 2016, salvo durante el segundo año de la pandemia. Tohá concluyó que las expectativas de resultados inmediatos en temas de seguridad son poco realistas y que se requiere un enfoque más comprensivo para abordar esta crisis que aqueja a Chile.

Con esto, Carolina Tohá busca no solo limpiar su nombre, sino también reafirmar su compromiso con la seguridad del país, creando un intenso debate sobre las responsabilidades del gobierno ante un contexto de creciente violencia. ¡No te pierdas los próximos acontecimientos de esta intrigante historia!