La noticia ha sacudido al ámbito educativo chileno: el Instituto Profesional Arcos, con una trayectoria de más de 40 años, cerrará sus puertas de manera definitiva a partir de 2025. Este cierre afectará negativamente a más de 4,199 estudiantes actualmente matriculados, incluyendo a 240 que están en su último año, muchos de los cuales están beneficiándose de la Beca Covid Arcos.

El rector del instituto, José Sanfuentes, indicó que las razones del cierre son estrictamente financieras. Según él, una reciente resolución de la Subsecretaría de Educación Superior establece un nuevo arancel regulado de $2.054.669 para todas las carreras ofrecidas, lo que implica una reducción del 43% en los ingresos del instituto. Sanfuentes advirtió que, sin cambios drásticos en el manejo financiero y sin nuevas inversiones, el instituto enfrentaría un déficit abrumador de más de 3.3 mil millones de pesos.

El impacto en los estudiantes es significativo. Afortunadamente, se han tomado medidas para minimizar la disrupción de sus estudios. En un esfuerzo para asegurar que los alumnos continúen su formación, se ha establecido una Comisión IP Arcos con la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Esta alianza permitirá a los estudiantes de la sede de Valparaíso integrarse al sistema de la universidad asegurando que su educación continúe con la misma calidad que han recibido hasta ahora.

“Estamos comprometidos a garantizar que esta transición sea lo más fluida posible”, afirmó Sanfuentes, resaltando la importancia de brindar alternativas viables para todos los estudiantes afectados.

Además, ha sido informado que la sede de Valparaíso de Arcos se unirá oficialmente a la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, donde se mantendrán los estándares de creatividad e innovación que caracterizaron al instituto durante más de cuatro décadas. Sin embargo, se espera que los detalles sobre cómo los estudiantes de la región Metropolitana continuarán sus estudios sean anunciados antes del 30 de octubre.

El cierre del Instituto Profesional Arcos es un recordatorio del delicado equilibrio que debe existir en el financiamiento de la educación superior en Chile y plantea preguntas sobre el futuro de otras instituciones educativas que dependen de políticas de aranceles y financiamiento público, especialmente en un contexto donde los estudiantes enfrentan constantes desafíos económicos.