Un verdadero susto fue lo que vivieron los comensales del famoso restaurante flotante “Fly Dining” en Puerto Rico el pasado 23 de febrero. Mientras disfrutaban de un lujoso brunch valorado en casi $125,000, la plataforma que se eleva a más de 48 metros de altura comenzó a moverse de manera violenta, generando pánico entre los 13 invitados a bordo.

De acuerdo con el gerente operativo del restaurante, la situación se debió a que se soltó la cuerda que estabiliza la plataforma ante el movimiento del viento. A pesar de que hubo un momento de caos, con el techo de la estructura chocando levemente con la grúa que la sostiene, se aseguró que no existía riesgo inminente de que la estructura cayera.

Una de las turistas presente narró su experiencia escalofriante, describiendo cómo en un principio todo parecía estar bien, pero de repente comenzó a temblar. Cuando alcanzaron la altura máxima, el ambiente se tornó caótico, con gritos de terror y objetos volando por los aires.

El incidente fue tan impactante que quedó grabado en video, desatando una ola de reacciones en las redes sociales. La compañía propietaria de Fly Dining, ubicada en la calle Loíza de Santurce, decidió cerrar temporalmente el establecimiento mientras se realizan las investigaciones correspondientes para determinar las causas de la falla en los cables estabilizadores.

El cuerpo de Bomberos local tuvo que intervenir, ordenando el cierre del restaurante hasta que se clarifique todo. Para mitigar la incomodidad de los onerosos clientes, se les ofreció el reembolso de su dinero, sumado a la opción de disfrutar de una nueva experiencia en el restaurante de forma gratuita.

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