En una reciente aparición en el programa de televisión Mucho Gusto, la diputada Camila Flores abordó la creciente problemática del comercio ambulante en las cercanías del Congreso en Valparaíso. La parlamentaria, en un intento por esclarecer la situación, afirmó: "Acá hay organización; en algunas comunas de la Región de Valparaíso se ve cómo llegan vehículos a marcar y a tomarse los espacios, lo más temprano posible".

Estas declaraciones provocaron la indignación de una vendedora ambulante, identificada como Sandra, quien se sintió directamente aludida y decidió responder enérgicamente al aire. "Los que trabajamos siempre acá tratamos de ordenarnos. Sabemos que en la reja del Congreso no se puede colgar nada; la gente que hace eso es la que viene de manera esporádica. Quiero aclarar una cosa a la señorita que está ahí", comentó, visiblemente molesta.

En sus palabras, Sandra enfatizó: "Ella dijo que llegábamos en vehículo a marcar. Ojalá que cuando usted dé de baja un vehículo lo pueda otorgar a nosotros, porque a nosotros no nos da para tener vehículo". Su respuesta fue un grito de auxilio que resonó más allá de las pantallas: la precariedad que enfrentan muchos vendedores ambulantes en la ciudad.

Además, la comerciante agregó: "Nosotros llegamos a la 1 de la mañana a marcar solo nuestro lugar de trabajo, porque Carabineros tampoco nos permite marcar lugares para otras personas. Yo no sé cómo ustedes saben que llegan vehículos y vecinos a vender si yo nunca los he visto aquí en la calle".

La crítica no se detuvo allí; Sandra fue clara en señalar la desconexión entre los parlamentarios y la realidad de los ciudadanos. "Los parlamentarios no trabajan para el pueblo. Lo que está demás en el puerto es el Congreso", expresó con contundencia.

Ante esta fuerte acusación, Camila Flores no se quedó callada. Respondiendo al descontento expresado por la vendedora, la diputada argumentó que "en Valparaíso tenemos problemas graves porque no hay empleo, porque nadie quiere invertir, porque la empresa privada trató de hacer proyectos durante años y todos fueron paralizados por la administración local".

La animada discusión deja al descubierto la tensión entre el comercio ambulante y las autoridades, cuestionando la efectividad de las políticas públicas en una de las ciudades más importantes de Chile. ¿Lograrán los legisladores encontrar soluciones reales a los problemas que enfrentan los comerciantes informales o continuarán siendo una voz olvidada en el debate político? ¡La polémica está servida!