En un impactante regreso a la casa de Gran Hermano, Cony Capelli, ganadora de la primera temporada, compartió revelaciones sorprendentes sobre Bigote, la famosa mascota del reality del año pasado. La influencer, quien reingresó el pasado domingo a la segunda temporada, no escatimó en detalles sobre las tensiones que marcaron la convivencia del año anterior.

Según lo que reporta Páginas 7, Capelli afirmó que durante su edición original, la atmósfera en la casa era extremadamente conflictiva, con peleas constantes que, se dice, afectaron profundamente a la mascota. «En nuestro Gran Hermano, despertábamos siempre confrontando, la atmósfera era tensa y brutal. Recuerdo que muchas veces nos despertábamos con gritos», relató Cony.

Contrariamente a su experiencia, destacó que en esta nueva temporada la energía entre los participantes es totalmente diferente, describiéndola como "increíble". «Ahora hay un ambiente de buena onda. La convivencia es mucho más armoniosa», añadió.

Sin embargo, al referirse a Bigote, Capelli reveló que el perro estuvo expuesto a la energía negativa que saturaba el espacio. «Bigote se portaba pésimo por el nivel de ansiedad que vivía. Tuvo momentos en que se volvió un verdadero perro agresivo, aunque eso nunca se mostró en la pantalla», explicó Cony, dejando entrever que las circunstancias en el reality tuvieron un impacto que fue más allá de lo que los televidentes pudieron ver.

Estas revelaciones no solo reflejan la lucha emocional que enfrentaron los concursantes, sino que también abren un espacio de reflexión sobre el efecto que los ambientes de estrés pueden tener en los seres vivos que los acompañan. ¿Cómo afectará esto a los futuros participantes y a sus respectivas mascotas? ¡Los fans del programa están expectantes!