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De "ilegítima" a "una insurrección": El controversial retorno de Nicolás Maduro a la presidencia en Venezuela

2025-01-10

Autor: Camila

Este viernes, la investidura de Nicolás Maduro fue calificada por muchos como "ilegítima" y "un golpe de Estado", en un acto protocolario donde se proclamó como presidente para un tercer período desde 2025 hasta 2031. Este evento fue respaldado por el Parlamento venezolano, las Fuerzas Armadas y el Tribunal Supremo, pero rechazado por sectores de la oposición y una significativa parte de la comunidad internacional.

La situación fue aún más tensa debido al intento fallido del opositor Edmundo González Urrutia, quien no logró llegar a Caracas para asumir la presidencia, lo que aumentó las suspicacias sobre la validez del proceso político en el país.

Estados Unidos, junto con varios países latinoamericanos como Perú y Paraguay, así como la Unión Europea, se manifestaron en contra de la legitimidad del acto y apoyaron a González Urrutia, a quien consideran el verdadero vencedor de las elecciones de julio.

A las 10:30 hora local, el evento de investidura se llevó a cabo en la Asamblea Nacional, un órgano dominado por el chavismo. La escasa asistencia de figuras políticas hizo eco del estado de aislamiento en que se encuentra el gobierno de Maduro, aunque sí se hicieron presentes los mandatarios de Cuba y Nicaragua. Posteriormente, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana mostró su apoyo inquebrantable hacia Maduro en un acto con transmisión nacional.

Mientras tanto, EE. UU. anunció que no reconoce a Maduro como presidente y enfatizó su compromiso de apoyar el retorno a la democracia en Venezuela. El secretario de Estado, Antony Blinken, declaró que "Maduro claramente perdió las elecciones y no tiene derecho a reclamar la presidencia". Los Estados Unidos incluso aumentaron la recompensa por la captura de Maduro de 15 a 25 millones de dólares, así como por otros altos funcionarios del régimen.

La UE también emitió un juicio crítico, indicando que la investidura de Maduro carece de la legitimidad democráticamente otorgada por el pueblo. En un comunicado, Kaja Kallas, jefa de la diplomacia europea, enfatizó que "las autoridades venezolanas perdieron una oportunidad clave de respetar la voluntad del pueblo".

Desde Perú, la presidenta Dina Boluarte y el gobierno paraguayo reafirmaron su reconocimiento hacia González Urrutia. La OEA, a través de su Secretario General Luis Almagro, también expresó su respaldo, subrayando la falta de legitimidad de la presidencia de Maduro.

En contraste, el presidente de Bolivia, Luis Arce, ofreció sus felicitaciones a Maduro, destacando una clara división en las posturas de los líderes latinoamericanos ante esta controversial situación.

Las reacciones no se hicieron esperar entre la oposición venezolana, que denuncia un "golpe de Estado" y movilizó protestas en varios países. La Plataforma Unitaria Democrática, bajo el liderazgo de María Corina Machado, anunció la falta de condiciones de seguridad para González Urrutia, quien se encuentra en Santo Domingo tras el bloqueo del espacio aéreo venezolano que impidió su llegada al país.

El expresidente colombiano Andrés Pastrana, quien también había planeado acompañar a González Urrutia, denunció el ambiente de miedo y represión instaurado por el régimen venezolano. A pesar de esto, muchos en el entorno opositor insisten en que el apoyo internacional está creciendo y que la comunidad internacional está cada vez más unida en oposición a la administración de Maduro.

Este episodio en Venezuela no solo destapa profundas crisis políticas, sino que también plantea desafíos humanitarios significativos, con millones de venezolanos enfrentando la escasez de alimentos y medicinas. La pregunta que queda es: ¿cuánto tiempo más podrá resistir Nicolás Maduro, ahora más aislado que nunca, al clamor por un cambio democrático en el país?