El debate sobre los motivos que llevaron a la FIFA a descartar a Viña del Mar como sede del Mundial Sub 20 en Chile para el próximo año ha cobrado fuerza. El ministro de Deportes, Jaime Pizarro, explicó que el Estadio Sausalito fue excluido principalmente por la falta de avances en las gestiones de mejora prometidas.

Este torneo internacional, programado del 27 de septiembre al 19 de octubre de 2025, se limitará a solo cuatro estadios: el Estadio Elías Figueroa de Valparaíso, el Estadio Nacional de Santiago, el Estadio Municipal de Rancagua, y el Estadio Fiscal de Talca. Esto representa una importante merma para la región y para el fanatismo local.

Durante una entrevista con CNN Chile, Pizarro dejó claro que la decisión de la FIFA fue dictaminada tras una revisión exhaustiva del progreso en las obras. "Una vez que se constataron distintas temáticas de avance, se llegó a la definición de cerrar este proceso en cuatro sedes. Esta situación no es nueva; ya ha ocurrido en eventos anteriores”, comentó.

El ministro también subrayó que los recintos gestionados por el Instituto Nacional de Deportes (IND) cumplían con los plazos y condiciones, en contraste con los estadios administrados por las municipalidades, como es el caso del Sausalito.

"Había gestiones comprometidas por los municipios. Las decisiones de FIFA consideran estas variables para determinar si las condiciones son realizables", agregó Pizarro, lo que refuerza la idea de que la administración municipal puede haber jugado un papel crucial en esta controversia.

La exclusión de Viña del Mar ha sido lamentada por muchos, especialmente por aquellos que esperaban ver a su ciudad brillar en un evento tan relevante. A pesar de esta situación, el ministerio se mantiene firme en apoyar y potenciar las sedes confirmadas, pero la incertidumbre sobre la organización de futuros campeonatos en la región persiste. ¿Qué nuevos desafíos podrían enfrentar las ciudades que aspiran a albergar eventos mundialistas? La respuesta está aún por verse.