Mundo

¡Escándalo en Malasia! Conflicto entre Swatch y el gobierno por relojes de colores arcoíris

2024-11-27

Autor: Lucas

La situación entre la popular marca suiza de relojes Swatch y el gobierno de Malasia ha alcanzado niveles de tensión increíble tras la reciente decisión de la justicia malasia. El Alto Tribunal de Kuala Lumpur ha ordenado a las autoridades del país devolver más de 170 relojes incautados debido a su diseño colorido que representa al colectivo LGTBI, incautación que ocurrió en mayo de 2023. El gobierno justificó la acción alegando que estas piezas 'van en contra de la moralidad'.

El ministro del Interior, Saifuddin Nasution, declaró que su equipo respetará la decisión del tribunal, aunque estudiarán la posibilidad de apelar. Se les ha dado un plazo de 14 días para devolver los relojes valorados en alrededor de 64.795 ringgit (casi 14.500 dólares o 13.915 euros) después de que el tribunal determinara que la confiscación fue ilegal por carecer de una 'orden de registro'.

Cabe destacar que esta decisión no incluye ninguna compensación económica, pero la sentencia indica que Swatch podría presentar una demanda adicional si los relojes resultan dañados.

Retrocediendo un poco en el tiempo, en mayo del año pasado, la policía confiscó exactamente 172 relojes de once tiendas Swatch en todo Malasia en una acción que desencadenó críticas de organizaciones defensoras de los derechos humanos. Swatch ha argumentado que estos relojes no representan ningún peligro para el orden público ni violan ninguna ley.

La respuesta del gobierno malasio fue drástica, prohibiendo la venta de relojes con los colores de la bandera del arcoíris LGTBI por considerarlos 'en contra de la moralidad', imponiendo penas de hasta tres años de cárcel y multas que pueden ascender hasta 20.000 ringgit (cerca de 4.475 dólares o 4.296 euros).

Es importante señalar que en Malasia la homosexualidad es ilegal y la sodomía se castiga con penas de hasta 20 años de prisión. La situación para la comunidad LGTBI ha empeorado en la última década, con cada vez más informes de discriminación y violaciones de derechos por parte de grupos como Human Rights Watch y Global Trans Rights.

El actual primer ministro, Anwar Ibrahim, tiene un pasado controversial, ya que pasó casi diez años en prisión por acusaciones de sodomía y corrupción, los cuales él siempre ha negado. Ahora en el poder, ha dejado claro que su administración no buscará ampliar los derechos del colectivo LGTBI.

Otro caso alarmante involucra a la empresaria transgénero Nur Sajat, quien huyó de Malasia por enfrentar cargos de violación de la ley islámica. Después de ser retenida brevemente en Tailandia, finalmente encontró asilo en Australia.

Adicionalmente, las restricciones culturales también se reflejan en la censura de películas que tocan temas LGTBI; títulos como 'La bella y la bestia' y 'Thor: Love and Thunder' fueron retirados de la cartelera en Malasia, dejando en evidencia la atmósfera de control y represión que vive este sector de la población.

Este conflicto es un claro ejemplo de cómo la lucha por los derechos LGTBI continúa enfrentando serios obstáculos en diversas partes del mundo, y Malasia se convierte en un foco de atención internacional sobre la falta de derechos y la discriminación que sufren estas comunidades.