País

Este lunes se vota la presidencia de la Cámara entre tensiones y alianzas sorprendentes

2025-04-07

Autor: Sofía

Este lunes se vivirá un momento clave en el Congreso chileno, ya que se llevará a cabo la votación para elegir al presidente de la Cámara de Diputados en medio de un clima de tensión entre las fuerzas políticas. La disputa está marcada por el duelo entre la Unión Demócrata Independiente (UDI) y Renovación Nacional (RN), así como por la incertidumbre que rodea al Frente Amplio (FA).

La jornada se anticipa repleta de sorpresas, donde los votos contarán más que nunca. Los candidatos por Chile Vamos, José Miguel Castro de RN y Jorge Alessandri de la UDI, han estado en campaña durante más de un mes. Las negociaciones están en su punto álgido, con un sinfín de presiones y alineaciones estratégicas.

Con la política como un delicado ajedrez, RN ha afirmado que no cederá en su posición. José Miguel Castro ha estado maniobrando para desmantelar el acuerdo que existe entre los sectores oficialistas e incluso ha reconocido contar con el respaldo de varios grupos que podrían asegurar su victoria. Además de los partidos Demócratas y Republicano, hay rumores de que también tiene el apoyo de parlamentarios del Partido Social Cristiano y figuras claves como Pamela Jiles y René Alinco, lo que podría sumar hasta 75 votos.

Si Castro logra consolidar este apoyo, su ascenso a la presidencia se podría definir en segunda vuelta, incluso con un solo voto de diferencia. Por su parte, Miguel Mellado, jefe de bancada de RN, sugiere que el resultado del duelo inicial debe fortalecer la unidad del partido, ya que el perdedor debe respaldar al ganador.

Sin embargo, la situación es volátil. Existen voces críticas dentro de RN, ya que algunos parlamentarios como Renée Alinco y Marisela Santibáñez no han mostrado un respaldo firme a Castro, lo que añade un elemento de incertidumbre a la votación. "La política es así de cambiante", dijo uno de los parlamentarios involucrados.

El contexto para la UDI es igual de complicado. Henry Leal, su jefe de bancada, advirtió que si bien su partido ha luchado por mantener el equilibrio de poder, se verá obligado a ceder en algunos aspectos para asegurar la gobernabilidad de la coalición. Sería un error subestimar la presión que la UDI tiene en este juego, especialmente considerando que en los últimos años la dirección de la Cámara ha estado en manos de RN.

Mientras tanto, el Frente Amplio se siente presionado. A pesar de la urgencia de mantener su posición en la mesa, la incertidumbre sobre ciertos votos clave, como el de Oyarzo, Alinco y Santibáñez, genera una atmósfera de nerviosismo. Hay reportes de que Karol Cariola, diputada que está de posnatal, podría regresar a votar, lo que le otorgaría al oficialismo una victoria inesperada si se juntan los votos necesarios.

El día de la votación es crucial y podría convertirse en un punto de inflexión. Mientras los partidos suman y restan votos, los chilenos esperan ver si se romperá el estancamiento o si se profundizará la división política. La atención está puesta no solo en la presidencia de la Cámara, sino también en el futuro de las alianzas políticas en Chile y la capacidad de los partidos para presentar una oferta coherente ante el electorado. La pregunta que queda es: ¿será esta una derrota más del FA en su búsqueda de consolidar poder, o podrán reponerse en las próximas elecciones?