Edgar Leonardo Monzalvo Gómez, un brillante estudiante de ingeniería en aeronáutica de la Universidad Politécnica Metropolitana de Hidalgo (UPMH), ha hecho historia al obtener el segundo lugar en la prestigiosa competencia del International Air and Space Program (IASP) 2024, organizado por la NASA.

Este evento, celebrado en Huntsville, Alabama, reúne a los mejores talentos jóvenes del mundo, dándoles la oportunidad de trabajar en innovadores proyectos de tecnología espacial bajo la supervisión de destacados expertos de la NASA. El proyecto presentado por Monzalvo Gómez se destaca por su enfoque innovador, ya que se basa en el desarrollo de una fibra compuesta de carbono y quitosano.

Esta combinación única no solo es más ligera que la fibra de carbono convencional, sino que además minimiza la interferencia con los componentes electromagnéticos. Esto representa un avance significativo para futuras misiones de exploración lunar, lo que podría cambiar la forma en que abordamos la fabricación de materiales para el espacio.

“Es una experiencia increíble que espero aprovechar al máximo”, expresó el estudiante al reflexionar sobre su participación en este programa de alto nivel. A pesar de las limitaciones de tiempo para la investigación y el desarrollo de su proyecto, Monzalvo Gómez y su equipo supieron integrar sus habilidades de manera efectiva, lo que les otorgó una ventaja competitiva notable. “Cada miembro del equipo aportó sus fortalezas, y eso fue clave para nuestro éxito”, añadió.

Monzalvo también destacó que su conocimiento previo en ingeniería de materiales fue fundamental para el desarrollo del proyecto. La interacción y el intercambio de ideas con colegas de diferentes partes del mundo hicieron que esta experiencia fuera aún más enriquecedora. “Invito a mis pares a que busquen oportunidades en programas internacionales. Participar transforma tu visión y abre nuevas oportunidades”, animó.

En cuanto a sus planes a futuro, el estudiante hidalguense ha expresado su deseo de continuar trabajando en su proyecto, con la ambición de enviarlo a la Estación Espacial Internacional (ISS). Esta intención no solo refleja su compromiso con la ciencia y la tecnología, sino también su visión de contribuir al avance de la exploración espacial.

Otro aspecto emocionante de su participación fue la posibilidad de conocer a un científico de la NASA, una experiencia que le brindó una inspiración adicional en su camino profesional. Sin duda, Edgar Leonardo Monzalvo Gómez es un nombre a seguir, no solo por su reciente logro, sino por su potencial para impactar el futuro de la ingeniería aeroespacial.