Cárceles al Estilo Bukele: ¿Una Solución Viable?

El ministro de Justicia chileno, Jaime Gajardo, salió al paso en la jornada de hoy a la polémica propuesta de Evelyn Matthei, precandidata presidencial de Chile Vamos, sobre construir cárceles de máxima seguridad al estilo de Nayib Bukele en El Salvador.

Matthei sugirió la edificación de un complejo penitenciario en las afueras de Copiapó, una idea que Gajardo rechazó tras enfatizar la necesidad de un enfoque más colaborativo y menos político en el ámbito de la seguridad.

La Seguridad: Un Asunto de Estado

Durante su entrevista en Radio Futuro, Gajardo pidió despolitizar el debate sobre seguridad y hacer de este un tema estatal. "No se trata de colores políticos, sino de que el Estado se comprometa a combatir el crimen de forma efectiva", subrayó.

El ministro resaltó el trabajo realizado por el Ejecutivo en este ámbito, asegurando que han implementado políticas basadas en evidencia y que su objetivo primordial es la eficacia en la lucha contra la delincuencia organizada.

¿Necesitamos Actuar Más Rápido?

Sobre las críticas acerca de los plazos de implementación del plan carcelario, Gajardo admitió que les gustaría avanzar más rápido. Sin embargo, subrayó la necesidad de contar con el apoyo del Congreso, destacando que han recibido una buena acogida para sus proyectos.

La Incompatibilidad de Bandas Criminales

Gajardo también abordó las diferencias entre las bandas criminales de El Salvador y las de Chile, enfatizando que "las maras de El Salvador no son comparables a las que operan en nuestro país". Esta distinción es crucial a la hora de diseñar estrategias penitenciarias.

Reinserción Social: Un Pilar Fundamental

Además, el ministro hizo hincapié en la importancia de la reinserción social dentro del sistema penitenciario chileno, algo que, según él, el modelo salvadoreño no considera adecuadamente. "Trabajar en un sistema que busca la reinserción es vital para la creación de sociedades más seguras", concluyó Gajardo.

El enfoque chileno, más parecido al modelo italiano o brasileño, busca encarcelar a los líderes de las bandas criminales, lo que contrasta con el enfoque de máxima seguridad generalizado en El Salvador.