Una alarmante noticia ha sacudido a la comunidad educativa del Instituto Humanidades de Concepción. La nueva directiva del Centro de Padres y Apoderados ha detectado un desfalco inesperado que asciende a casi 76 millones de pesos, fondos que misteriosamente han desaparecido de las cuentas bancarias de la organización.

Ante la gravedad del caso, la nueva directiva ha tomado medidas inmediatas, incluyendo la contratación de asesoría legal y la presentación de una denuncia formal ante la Policía de Investigaciones (PDI).

La situación ha sido manejada con cautela y hermetismo por parte de los miembros del nuevo directorio. En un comunicado emitido el 26 de septiembre, informaron que al asumir sus funciones recibieron información de los antiguos dirigentes sobre dos cuentas bancarias: una corriente que supuestamente contenía 6 millones de pesos y una a plazo con 70 millones, ambas del Banco BICE, con la última renovada en marzo y vigente hasta septiembre de 2025.

Sin embargo, al revisar las cuentas, el Centro de Apoderados se llevó una sorpresa desgarradora: en la cuenta corriente solo había un poco más de 124 mil pesos, y el depósito a plazo había desaparecido por completo, lo cual fue confirmado por el abogado Cristian San Martín durante una asesoría informal a los padres.

La denuncia ante la PDI no solo busca esclarecer un posible delito económico, sino también recuperar los fondos sustraídos. Además, el Centro de Padres ha solicitado al Banco BICE acceso a las cartolas históricas para rastrear el paradero del dinero desaparecido.

Este escándalo resalta una problemática alarmante sobre la gestión de fondos en organizaciones educativas y la importancia de la transparencia financiera. La comunidad educativa espera respuestas rápidas y justas, y se indaga sobre cómo pudo ocurrir un desfalco de esta magnitud sin ser detectado anteriormente.

¿Quién se beneficiará realmente de este escándalo? La comunidad sigue en suspenso mientras se desarrolla la investigación.