En un giro sorpresivo de los acontecimientos, la Corte Suprema de Chile, a través del fiscal judicial Jorge Pizarro, ha recomendado no extraditar al exfrentista Pablo Muñoz Hoffman desde Bolivia. Esta decisión, que ha causado revuelo en el ámbito legal y político, será formalmente anunciada mañana, 15 de enero.

Pablo Muñoz Hoffman, conocido por su vinculación con el grupo terrorista Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), fue detenido en Bolivia pero liberado al cabo de 24 horas a pesar de una notificación roja de Interpol. Este hecho llevó al canciller chileno, Alberto van Klaveren, a exigir explicaciones al gobierno boliviano, despertando cuestionamientos sobre la efectividad de la cooperación internacional en materia de justicia.

En su defensa, el exfrentista ha argumentado que no existen órdenes de aprehensión en su contra antes del 7 de enero y que su condena de cuatro años por asociación ilícita ya está cumplida. Además, señala que los delitos de robo que se le imputan corresponden a hechos ocurridos hace más de 32 años, lo que, sostiene, debería invalidar cualquier proceso penal vigente por el principio de prescripción.

Según El Mercurio, el informe del fiscal Pizarro, dirigido a la Sala Penal del máximo tribunal, justifica la recomendación de no extraditar a Muñoz Hoffman al argumentar que los delitos mencionados ya han prescrito, tanto por el tiempo transcurrido como por el contexto legal aplicable a este tipo de casos.

La argumentación es contundente: el tiempo requerido para que prescriban los delitos de simple delito, como la asociación ilícita, es de cinco años. Sin embargo, el tiempo de cómputo para la prescripción penal en el caso de Muñoz Hoffman debe contarse desde la fecha de incumplimiento de su condena, el 31 de diciembre de 1996. Esto implica que, a más de 28 años del hecho, su pena ha caducado según las leyes chilenas.

Este desenlace plantea importantes interrogantes sobre cómo se gestionan estos casos en el contexto internacional y la eficacia de los sistemas judiciales. ¿Se anticipa una presión internacional por parte de Chile para reexaminar su postura respecto a la extradición de criminales económicos y de lesa humanidad? La controversia está servida y será un asunto a seguir en las próximas semanas. ¡No te pierdas las actualizaciones sobre este polémico caso!