
¡Impactante Revelación! ¿Por qué los adultos olvidan su primera infancia? Nuevas evidencias científicas vuelven a sorprender
2025-03-20
Autor: Pedro
Durante años, los científicos han creído que la razón por la cual no recordamos nuestra primera infancia se debía al desarrollo incompleto del hipocampo, la región del cerebro responsable de la formación de recuerdos. Sin embargo, un revolucionario estudio de la Universidad de Yale ha destrozado esta hipótesis, mostrando que incluso bebés de tan solo 12 meses son capaces de codificar recuerdos.
Esta nueva investigación revela que la famosa amnesia infantil (la incapacidad de recordar los primeros años de vida) podría tener más que ver con fallos en el proceso de recuperación de la memoria que con la dificultad de formar recuerdos desde el principio. Es un descubrimiento que podría cambiar nuestra comprensión de cómo evolucionan nuestras capacidades cognitivas desde la infancia.
Los investigadores, dirigidos por Tristan Yates, llevaron a cabo un experimento con 26 bebés de entre 4 y 25 meses. Utilizando la resonancia magnética funcional, monitorizaron cómo se activaba el hipocampo de los bebés mientras realizaban una tarea de memoria. Les mostraron una imagen de un rostro, un objeto o una escena, seguida de nuevas imágenes. Luego, se les presentó una imagen familiar junto a una nueva.
El análisis mostró que los bebés miraban más tiempo las imágenes que ya habían visto, especialmente cuando mostraban mayor actividad en la parte posterior del hipocampo, que es la área asociada con la memoria episódica en adultos. Esta capacidad de los bebés sugiere que ya están en condiciones de formar recuerdos episódicos básicos.
Detrás de esta increíble habilidad se encuentra la memoria episódica, que se refiere a la capacidad de recordar eventos específicos, a diferencia del aprendizaje estadístico, que ayuda a los bebés a reconocer patrones en su entorno. Es notable que, aunque los bebés excelentemente bien en aprendizaje estadístico desde los 3-4 meses, la memoria episódica comienza a desarrollarse en torno a los 12 meses, lo que indica un avance significativo en su desarrollo cognitivo.
¿Qué sucede después con estos recuerdos? La codificación es solo la primera parte del proceso de recordar; posteriormente, estos recuerdos deben consolidarse durante el sueño, un factor crucial para que permanezcan accesibles a largo plazo. Sin embargo, el estudio sugiere que aunque los recuerdos pueden formarse, pueden volverse inaccesibles, lo que puede ser la clave detrás de la amnesia infantil.
Estos fascinantes hallazgos coinciden con investigaciones recientes en roedores, que sugieren que los recuerdos de la infancia pueden persistir hasta la adultez, pero se vuelven difíciles de recuperar sin estimulación adecuada. Esto plantea preguntas profundas sobre cómo nuestras experiencias tempranas moldean quienes somos y cómo podemos acceder a esos recuerdos perdidos.
Así que la próxima vez que pienses en tu infancia, recuerda que, aunque no puedas recordar esos primeros años, el hecho de que tu cerebro haya podido codificar esos momentos es un testimonio de la increíble capacidad de aprendizaje desde la más tierna edad.