Desafíos de Salud en España

En la lucha por la salud pública, la Sociedad Española de Medicina de Familia se enfrenta a desafíos alarmantes relacionados con el consumo de tabaco, vapeo, obesidad y alcohol en España. Mientras que el consumo de alcohol en el país se mantiene dentro de la media europea, el peligro radica en la percepción errónea de los jóvenes que creen que ‘saben beber’ sin considerar las graves consecuencias que esto puede acarrear.

El tabaco sigue siendo un verdadero enemigo, siendo responsable de más de 50,000 muertes anuales en España, mientras el vapeo, que atrapa a numerosos jóvenes, contiene nicotina y se presenta como una alternativa menos dañina, aunque en realidad no lo es. Asensio López, coordinador del programa de actividades preventivas de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, alertó sobre la urgencia de implementar limitaciones más severas para combatir su consumo.

La obesidad es otro reto significativo. Con tasas alarmantemente altas en comparación con otros países europeos, esta situación es impulsada por el aumento del consumo de comida rápida y el abandono de la tradicional dieta mediterránea. Las mujeres, en particular, presentan una drástica reducción de actividad física a partir de los 16 o 17 años, lo que contribuye a esta crisis.

El consumo excesivo de alcohol, que causa entre 18,000 y 20,000 muertes anuales, está vinculado a varios tipos de cáncer, entre ellos el de mama y pulmón, y también es un factor que alimenta la obesidad, provoca peleas y incrementa los accidentes de tráfico. A pesar de estar en la media europea en cuanto a consumo, los jóvenes suelen subestimar su ingesta, mencionando que lo 'normal' son cuatro o cinco copas.

López enfatizó la necesidad de una estrategia integral para abordar estos delicados problemas, la cual debe involucrar a centros de Atención Primaria, ayuntamientos, escuelas y gobiernos. La clave está en la acción coordinada: “Cada uno tiene que poner un puntito para que eso sume”, afirmó.

Particularmente en Canarias, la situación es aún más preocupante, con índices de obesidad y actividad física que superan la media nacional. Además, las enfermedades cardiovasculares, que están directamente relacionadas con la falta de ejercicio y la obesidad, han sido señaladas como una de las principales causas de mortalidad.

Con un clima privilegiado que debería facilitar un estilo de vida saludable, estas estadísticas son un llamado urgente a la acción. La Sociedad Española de Medicina de Familia advierte que, si no se toman medidas preventivas y concienciadoras, las consecuencias podrían ser devastadoras para las generaciones futuras.