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¡Increíble! El tiburón de Groenlandia podría tener el secreto para prolongar nuestra vida
2024-12-16
Autor: Lucas
Introducción
El tiburón de Groenlandia, la criatura más longeva del mundo, podría ser la clave para alargar la vida humana, según un reciente estudio fascinante.
Hábitat y longevidad
Estos tiburones extraordinarios habitan principalmente en las frías y profundas aguas del Atlántico Norte y el Ártico, siendo los únicos tiburones que soportan temperaturas heladas durante todo el año. Un estudio realizado en 2016 determinó que estos animales son los vertebrados más longevos del planeta, con edades estimadas que oscilan entre los 272 y más de 500 años.
De hecho, algunos de estos ejemplares pudieron haber estado nadando en estas gélidas aguas desde la época colonial, lo que ha llevado a los investigadores a decidir investigar cómo logran vivir tanto tiempo.
Investigación del genoma
Recientemente, un equipo de científicos ha mapeado el genoma del tiburón de Groenlandia, secuenciando cerca del 92% de su ADN, lo que aporta información crucial sobre su funcionamiento interno y ofrece pistas sobre su asombrosa resistencia.
“Gracias al análisis del genoma, podemos entender mejor qué mutaciones se han acumulado en este tiburón que han llevado a una esperanza de vida tan extraordinaria”, explicó el Dr. Steve Hoffman, principal autor del estudio y biólogo computacional del Instituto Leibniz sobre el Envejecimiento en Alemania.
Implicaciones del estudio
La importancia de este estudio radica en que entender los mecanismos de longevidad del tiburón de Groenlandia podría elucidarnos maneras de extender la vida humana. Los expertos han descubierto que el genoma de este tiburón es el doble de extenso que el de un ser humano y el más grande registrado hasta ahora en cualquier tiburón.
Una de las razones por las que su genoma es más largo puede ser su capacidad superior para reparar el ADN, un rasgo que se observa en muchas especies con una notable longevidad. Más del 70% del genoma de esta especie está constituido por 'genes saltadores', que son capaz de moverse dentro de la secuencia de ADN, multiplicándose y, en ocasiones, provocando mutaciones.
Normalmente, estas duplicaciones se consideran parásitos genéticos, asociados con efectos nocivos, como diversas enfermedades genéticas. Sin embargo, parece que los genes que reparan el ADN en esta especie han actuado como genes saltadores, distribuyéndose en el genoma, y ralentizando el proceso de envejecimiento al reparar el ADN dañado.
Conclusiones y futuro de la investigación
Como resultado, “el efecto perjudicial de estos elementos transponibles no solo se revierte, sino que potencialmente mejora la integridad del genoma en el tiburón de Groenlandia”, añadió el Dr. Arne Sahm, bioinformático y profesor adjunto en la Universidad del Ruhr de Bochum, Alemania.
Los investigadores sugieren que en algún momento, los genes de reparación del ADN de esta especie han desarrollado la capacidad de multiplicarse, lo que contribuiría aún más a la reparación del ADN y, por ende, a su asombrosa longevidad.
El estudio sobre el tiburón de Groenlandia podría no solo esclarecer los secretos de la longevidad de esta especie sino también abrir nuevas puertas en la investigación sobre el envejecimiento humano. Los científicos planean comparar el ADN del tiburón de Groenlandia con el de otras especies que tienen una vida más corta, a fin de ofrecer pruebas adicionales sobre este rasgo singular, según Hoffman.
La investigación de otras especies longevivas podría ayudar a comprender mejor el proceso de envejecimiento en diversos organismos, pudiendo incluso conducir a aplicaciones prácticas para aumentar la esperanza de vida humana.
"Imaginamos un futuro donde se pueda aplicar terapia genética, tal vez pudiendo otorgar a las personas un gen del tiburón de Groenlandia. Aunque puede parecer cosa de ciencia ficción, algo más realizable sería diseñar un fármaco que actúe sobre un gen humano, mejorando así la reparación del ADN en los humanos,” concluyó Sahm.
A medida que la ciencia avanza, no podemos evitar preguntarnos si alguna vez podremos extraer la sabiduría de estos antiguos tiburones para mejorar nuestra propia longevidad. ¡El futuro de la biología y la medicina está más cerca de lo que pensamos!