¡Increíble! La IA podría anticipar y vender nuestras decisiones antes de que las tomemos
2025-01-02
Autor: Isidora
Un reciente estudio revela que en un futuro no muy lejano podríamos encontrarnos con asistentes de inteligencia artificial (IA) capaces de prever e influir en nuestras decisiones antes de que seamos conscientes de ellas. Según investigaciones realizadas por expertos en ética de la IA en la Universidad de Cambridge, estas "intenciones" en desarrollo podrían ser comercializadas en tiempo real a empresas que busquen satisfacer nuestras necesidades, incluso antes de que nosotros mismos las reconozcamos.
Este nuevo fenómeno se enmarca en lo que los investigadores denominan la "economía de la intención", un mercado que podría volverse sumamente lucrativo pero también complejo y problemático. Desde decisiones cotidianas como la compra de entradas para el cine hasta el apoyo a candidatos políticos, la capacidad de la IA para registrar e interpretar señales digitales de intención podría crear una nueva era de manipulación digital.
Los expertos del Centro Leverhulme para el Futuro de la Inteligencia de Cambridge sugieren que el auge de las IA generativas y nuestra creciente interacción con chatbots están abriendo una nueva frontera en las “tecnologías persuasivas”. Los asistentes “antropomórficos”, desde chatbots hasta tutores virtuales, tendrán acceso a vastas cantidades de datos psicológicos y de comportamiento, muchos de los cuales serán recolectados mediante conversaciones informales. Esta capacidad permitirá a la IA comprender nuestros hábitos, anticipar nuestras reacciones y ofrecer respuestas que imiten nuestras preferencias, generando niveles de confianza que podrían facilitar la manipulación social a gran escala.
El Dr. Yaqub Chaudhary, investigador visitante en LCFI, advierte que se están invirtiendo recursos significativos para implementar asistentes de IA en todas las facetas de nuestras vidas, planteando serias preguntas sobre los intereses detrás de estas tecnologías. Según Chaudhary, las inferencias que se pueden realizar a partir de nuestras interacciones informales son mucho más profundas que los simples registros de nuestras actividades online. Él también señala que ya se están desarrollando herramientas de IA para especular y hasta manipular intenciones humanas.
Por su parte, el Dr. Jonnie Penn, historiador de tecnología, reflexiona sobre cómo, durante décadas, la atención ha sido el principal recurso de intercambio en el mundo digital. Nos advierte que, si no se regula adecuadamente, la economía de las intenciones podría convertir nuestras motivaciones en una nueva "moneda", dando pie a una fiebre del oro para las empresas centradas en la captura y venta de estas intenciones.
Penn y Chaudhary escriben que esta economía de la intención podría realizar un mapeo temporal del enfoque del usuario, así como su estilo de comunicación, y cómo estos se relacionan con nuestras decisiones finales.
El estudio subraya que la economía de la intención todavía es un concepto incipiente, pero ya se observan las primeras señales de esta tendencia, gracias a las investigaciones publicadas y las insinuaciones realizadas por los gigantes tecnológicos. Es crucial que empecemos a considerar cómo un mercado así podría afectar nuestras libertades individuales, el ejercicio de la democracia y la competencia justa en el ámbito económico antes de que sus posibles consecuencias se hagan evidentes.