Esta mañana, el Estadio Víctor Jara se convirtió en el epicentro de la esperanza para miles de migrantes que se agolpan en las afueras, buscando enrolarse en el Registro Civil. Este llamado de la institución se realizó en medio de un contexto de incertidumbre, tras el anuncio del Gobierno de un "perdonazo" limitado para quienes se encuentren en el sistema migratorio.

La situación se intensificó con algunos altercados, ya que muchos de los asistentes comenzaron a hacer fila desde el domingo a las 17:00 horas. La presión y la espera prolongada generaron tensiones entre quienes esperaban su turno y los que recién llegaban al proceso.

Aproximadamente entre 2,500 y 3,000 personas se congregaron en el lugar, lo que llevó a la intervención de Carabineros para aclarar el procedimiento y despejar la multitud. Muchos extranjeros estaban confundidos, pensando que el trámite estaba relacionado con la obtención de la residencia definitiva, cuando en realidad se trata de inscribir a quienes están en situación migratoria irregular, pero que ya poseen contratos de trabajo y buscan obtener un RUN provisional para contribuir a la seguridad social.

Aunque la situación se normalizó en horas posteriores, la fila se fue deteniendo, dejando a unas 1,000 personas varadas debido a problemas técnicos con el sistema de registro.

"El mensaje fue claro"

Al ser consultados sobre cómo se informaron del procedimiento, asistentes comentaron a las redes que la información había llegado a través de redes sociales y del propio subsecretario, Luis Cordero, quien había sido categórico sobre el inicio del proceso de enrolamiento.

El Registro Civil había establecido un horario de atención de 09:00 a 14:00 horas, con capacidad para 700 personas, un número que claramente no se ajustaba a la gran afluencia de migrantes. Ante la demanda, el servicio decidió extender la atención hasta las 17:00 horas y anunció que el operativo se llevaría a cabo durante una semana más.

Gobierno niega "efecto llamada"

El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, explicó que estos procedimientos de enrolamiento son rutinarios y están destinados a proporcionar identificaciones a los migrantes que las necesitan para unificar sus datos en sistemas de salud o previsión, lo que está respaldado por la Ley de Migraciones vigente. Afirmó que este proceso es distinto a aquel que realizó la PDI en 2023 y que fue finalizado en 2024, donde se empadronaron cerca de 182,000 personas.

Adicionalmente, aseguró que no hay un "efecto llamada" porque las regulaciones están dirigidas a quienes ya han sido empadronados. El subsecretario del Interior, Luis Cordero, también enfatizó que se estudia la posibilidad de una regularización acotada, pero que no está ligada a un aumento de la inmigración irregular.

Diputados RN piden revisión a la Contraloría

Mientras tanto, un grupo de diputados de Renovación Nacional (RN) ha presentado un requerimiento a la Contraloría, cuestionando los criterios de regulación que propone el Gobierno, como el arraigo familiar o laboral, y la limpieza de antecedentes de los solicitantes. Andrés Longton, uno de los vocales, comentó sobre las potenciales ilegalidades en la propuesta del Ejecutivo, señalando que la Ley de Migración establece sanciones claras para quienes ingresen al país de manera irregular.

En un momento en que las políticas migratorias son objeto de debate intenso, esta situación en el Estadio Víctor Jara refleja la desesperación y la necesidad de muchos en busca de una nueva oportunidad.