La majestuosa Costa Verde, un ícono de la belleza natural en Perú, se extiende a lo largo del océano Pacífico, moldeada por milenios de erosión y sedimentación. Este impresionante litoral no solo es un refugio para los limeños y turistas, sino también el resultado de procesos geológicos fascinantes que acaban de ser desentrañados por un grupo de investigadores liderado por el Dr. Willem Viveen.

Antes de 1970, los limeños solo podían contemplar el mar desde el tradicional malecón. Sin embargo, este panorama cambió radicalmente con la inauguración del ‘circuito de playas’, que permitió el acceso directo al océano, revolucionando la manera en que los limeños interactuaban con su costa.

El estudio más reciente, realizado por el grupo de investigación en geología sedimentaria de la PUCP, arrojó luz sobre la falta de información sobre la antigüedad de los sedimentos de la Costa Verde. Viveen explicó que es sorprendente que, siendo un lugar emblemático del Perú, no se hubiera encontrado una investigación que determinara su edad.

Los científicos encontraron que la base de la Costa Verde se formó hace unos asombrosos 121,000 años, con su capa superior, donde actualmente está el malecón, teniendo alrededor de 6,000 años de antigüedad. Para llegar a estas conclusiones, se utilizaron técnicas avanzadas como la datación por luminiscencia, que resultó ser muy efectiva, sobre todo al emplear feldespato en lugar de cuarzo, como se había hecho anteriormente.

Durante el estudio, el equipo también recolectó y analizó 5,000 muestras de piedra, lo que les permitió descubrir 13 ciclos de variación en el tamaño de los granos, confirmando la influencia del antiguo río Rímac en la configuración actual de la Costa Verde. Este hallazgo es significativo, ya que revela cómo los cambios en el caudal del río afectaron la sedimentación a lo largo de los siglos.

Un dato curioso mencionado por Viveen es que durante la Última Edad de Hielo, el nivel del mar estaba 130 metros por debajo del actual, una situación que permitió la formación de la Costa Verde tal como la conocemos. Además, identificaron que el tamaño de los granos de grava en la costa variaba de acuerdo con las precipitaciones: aumentaban con la lluvia y disminuían en temporadas secas, mostrando una clara relación entre el clima y la geología de la región.

Este descubrimiento no solo brinda un nuevo entendimiento sobre la Costa Verde, sino que también establece la importancia de realizar más estudios geológicos para abrir una ventana al pasado de Perú. Con la historia de su formación comenzando a desenredarse, queda por ver cómo estos hallazgos impactarán la conservación de este tesoro natural y su futuro frente a los desafíos ambientales.