María José "Coté" López no es solo una influencer chilena; es una auténtica empresaria que ha conquistado el mundo de la moda y la belleza. Dueña de la marca de ropa deportiva y urbana "Be Active" y de su propia línea de maquillaje, "Clo By Coté López", ha logrado construir un imperio que la ha afianzado como una de las figuras más influyentes en el país.

Además de compartir sus productos, Coté utiliza su cuenta de Instagram para ofrecer consejos prácticos a sus seguidores. Recientemente, ha lanzado una línea de cuidado capilar que promete revolucionar el mercado. Pero eso no es todo; la última hazaña de Coté ha dejado a todos con la boca abierta.

En una reciente publicación, la rubia mostró cómo realizó una sorprendente renovación capilar a su padre, Gonzalo López. Durante un día de piscina, decidió convertir a su papá en el modelo de su nuevo tratamiento capilar, llamado "Magic". Este tratamiento incluye pasos como pre lavado, champú, máscara capilar, protector de calor y sérum.

"Se busca: Tarzán de la selva. Mi gente, ¡a este pelo le vamos a aplicar los pasos de Clo!", dijo Coté en su historia, mientras mostraba a Gonzalo con el cabello totalmente alborotado. Los resultados finales fueron compartidos en un divertido video donde se puede ver a Gonzalo con un brillo y manejo impresionante en su cabello largo hasta los hombros.

"¡Se convirtió en un príncipe encantador!", escribió Coté en la descripción del post, reflejando lo satisfecho que quedó con la transformación. Pero lo más peculiar fue el descargo de Gonzalo después de la sesión: "Yo no sé si ustedes harían lo mismo por su hijo, pero vine a una reunión aquí en WeHub en esta facha, con el pelo así (casi liso). ¿Qué van a pensar? Que no trabajo haciendo vuelo en parapente, en la playa, con la sal, con el pelo hecho mierda. No me van a creer".

Con esta audaz e inesperada iniciativa, Coté ha dejado claro que la familia y la belleza pueden ir de la mano. Su creatividad no solo resalta su sentido de la moda, sino también el amor que siente por su padre, demostrándonos que, a veces, la familia es lo primero y que el cuidado personal no tiene edad. ¡Qué gran ejemplo de cómo un pequeño gesto puede cambiar la confianza de una persona! La historia de Coté y su padre seguramente inspirará a muchos a explorar nuevas posibilidades en el mundo del cuidado personal!