Un grupo de investigadores ha sorprendido al mundo al diagnosticar la salud de las princesas Disney, y lo que han descubierto no es nada alentador. Aunque parezca un juego, el estudio ha sido publicado en el renombrado British Medical Journal, pero muchos se pregunto: ¿es esto lo más inteligente que se puede estudiar?

La realidad es que el análisis no proporciona datos claros sobre cuántas princesas sufren problemas de salud, ni mucho menos su impacto en la salud pública. Sin embargo, el equipo dirigido por Sanne van Dijk ha arrojado luz sobre la condición emocional y física de algunas de las más icónicas heroínas de la animación. Este estudio, presentado como entretenimiento, revela una verdad oscura que podría afectar la manera en que vemos estos cuentos clásicos.

Blancanieves

Se ha encontrado que Blancanieves afronta altos riesgos para su salud mental debido a su aislamiento social. Sus problemas podrían derivarse de una profunda soledad que potencialmente desencadena depresión y ansiedad, algo que muchos estudios han correlacionado con enfermedades como las cardiovasculares. Este conmovedor retrato nos recuerda que incluso las historias de hadas pueden tener un lado sombrío.

Jasmín

Jasmín, por otro lado, vive bajo el pesado manto de reclusión en el palacio de Agrabah, conviviendo con su peligroso tigre, Rajah. Aquí se presenta un dilema: su vida está llena de riesgos zoonóticos que podrían ser el inicio de una nueva pandemia. ¡Imagínate! La presión de ser una princesa no solo es emocional, sino también potencialmente mortal.

Cenicienta

Luego, está Cenicienta, quien tras la muerte de su padre es sometida a un estricto régimen de trabajo en un ambiente lleno de polvo y cenizas. ¡Pero eso no es todo! La purpurina de su hada madrina puede estar amenazando seriamente su salud a través de la inhalación de microplásticos. Este hallazgo es alarmante y nos hace cuestionar los estándares de salud en el contexto de estas historias.

Pocahontas

En un giro drástico, los investigadores afirman que Pocahontas, tras saltar de una altura peligrosa, probablemente no sobreviviría. Con una caída de 252 metros, es posible que su historia terminara mucho antes de lo que pensábamos. Un recordatorio inquietante de que los cuentos de hadas no siempre tienen finales felices.

Aurora

Aurora, en su eterno sueño, enfrenta el oscuro lado de los trastornos del sueño que pueden llevar a una serie de problemas de salud, incluyendo el riesgo de obesidad y enfermedades cardiovasculares. Es un giro irónico para una vida que debería haber estado llena de felicidad.

Mulan

Para Mulan, la presión de vivir en función del honor familiar puede tener efectos devastadores en su salud mental. La expectativa de cumplir con un rol impuesto puede ser un verdadero enemigo oculto que desgasta su bienestar.

Bella

Bella, quien es secuestrada por la Bestia, corre un serio riesgo de enfermedades zoonóticas y también de sufrir efectos psicológicos por su atrapante relación, que podría reflejar el famoso síndrome de Estocolmo. ¡Las cosas no son siempre lo que parecen en el mundo de Disney!

Rapunzel

Finalmente, Rapunzel, con su cabello de 21 metros, enfrenta el riesgo de alopecia por tracción. Este detalle tan peculiar muestra un lado poco considerado sobre el impacto físico que estereotipos de belleza pueden tener.

Al mirar a estas famosas princesas desde la óptica de la salud, se nos recuerda que incluso los personajes de nuestros sueños pueden estar cargados de traumas y dificultades. ¿Realmente conocemos a estas princesas? Esto abre la puerta a preguntas más profundas sobre la influencia que tienen en la niñez y en la cultura popular. ¡Prepárate para replantearte tu infancia con estos padres de cuentos!