Tecnología

Joven chileno desafía el futuro en la COP16: utiliza tecnología de la NASA para proteger el medio ambiente

2024-12-12

Autor: Mateo

Benjamín Sánchez: Un referente en la lucha por la sostenibilidad

Benjamín Sánchez, un destacado estudiante de Ingeniería Civil Industrial de la Universidad Técnica Federico Santa María en Valparaíso, ha sido elegido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para representar a Chile y la región del Cono Sur en la Conferencia de las Partes (COP16) sobre Desertificación, que se lleva a cabo del 2 al 15 de diciembre en Riyadh, Arabia Saudita.

Con tan solo 23 años, Benjamín se ha convertido en un referente entre los jóvenes en la lucha por la sostenibilidad. En una reciente videollamada desde Riyadh, destacó su papel como un canal de comunicación entre la juventud y las Naciones Unidas, enfatizando que su misión es inspirar a otros jóvenes chilenos a participar activamente en discusiones ambientales. “Es un momento crucial; necesitamos nuevas ideas para enfrentar los desafíos actuales,” afirma.

GreenCopper Dynamics: Innovaciones para un futuro sostenible

Una de las iniciativas más apasionantes de Benjamín es el proyecto GreenCopper Dynamics, el cual se centra en desarrollar soluciones sostenibles para el sector minero utilizando avanzada tecnología de la NASA. Este innovador proyecto, que es operado exclusivamente por estudiantes de diferentes áreas, busca mitigar los impactos ambientales de la minería, un sector crucial en la economía chilena.

El futuro ingeniero explica que, aunque la minería es vital para Chile, también es responsable de numerosos impactos negativos en el medio ambiente. “Nuestro objetivo es encontrar maneras de extraer cobre y otros minerales que sean más respetuosas con el planeta. La situación actual de la industria extractiva no puede sostenerse,” señala.

La colaboración tecnológica en la protección de recursos

Uno de los enfoques centrales de GreenCopper Dynamics es la protección del agua en las áreas mineras. “La contaminación del agua es un problema grave, especialmente con los desechos de la minería. Utilizamos sensores de la NASA para monitorear en tiempo real la temperatura y el pH de los cuerpos de agua cercanos a las actividades mineras, lo que nos permite prevenir desastres ambientales,” explica.

Benjamín se muestra esperanzado sobre el potencial de este tipo de tecnología para revolucionar la industria minera, que todavía enfrenta desafíos significativos en la búsqueda de un equilibrio entre la extracción y la sostenibilidad. “El cobre que exportamos muchas veces se transforma en productos con mayor valor en otros países. Necesitamos quedarnos con ese valor agregado aquí, en Chile,” añade.

El joven también enfatiza la importancia de la colaboración entre diversas disciplinas. “Un ingeniero no puede hacer todo solo; debemos trabajar en equipo, educar a la población y fomentar a las nuevas generaciones a involucrarse en la sostenibilidad,” sostiene.

El futuro y el legado de Benjamín Sánchez

Al regresar a Chile tras la COP16, Benjamín planea contactar a académicos de diversas áreas para formar un esfuerzo conjunto hacia sus metas. Ha estado conversando con Eduardo Silva, subdirector de la División de Medioambiente, Cambio Climático y Océanos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, con la esperanza de impulsar cambios significativos dentro de las políticas relacionadas con la minería y el medio ambiente.

Su mensaje es claro y motivador: desea motivar a otros jóvenes a unirse a este movimiento por el cambio, creando una red de apoyo que les permita ser escuchados en un sector a menudo dominado por intereses establecidos. “La juventud tiene el poder de revolucionar el futuro, solo necesitamos comenzar a dialogar y a compartir nuestras ideas,” concluye Benjamín.

Este estudiante no solo es un ejemplo a seguir, sino también un recordatorio de que las iniciativas innovadoras nacen de la pasión y el compromiso de los jóvenes. La COP16 puede ser solo el comienzo de un camino hacia un futuro más sostenible para Chile y el mundo.