Juan Andrés Lagos, miembro de la comisión política del Partido Comunista y exasesor de la Subsecretaría del Interior, ha dado un giro inesperado al reconocer que fue un error no haber aceptado la reforma de pensiones propuesta por el ex-presidente Sebastián Piñera.

El exmandatario había planteado una significativa reforma que incluía un aumento del 6% en la cotización adicional. De ese porcentaje, un 3% se destinaría a una Cuenta de Ahorro Previsional individual para cada trabajador, mientras que el restante 3% se utilizaría para establecer un nuevo Programa de Ahorro Colectivo y Solidario (PACS).

"La historia es como es y la verdad es que debemos asumir que hubo momentos en que un acuerdo, que hoy está en riesgo, podría haberse concretado", expresó Lagos en una reciente entrevista con CNN Chile. Este reconocimiento ha generado un gran debate en el ámbito político sobre la dirección que ha tomado la discusión en torno a las pensiones en Chile.

Sin embargo, el dirigente comunista no se detuvo ahí y criticó fuertemente a la oposición por no esforzarse lo suficiente para alcanzar un consenso en este tema crucial. "Hay un sector que ha hecho poco o nada por encontrar soluciones que garanticen pensiones dignas", añadió.

Lagos también defendió la postura del Presidente Gabriel Boric, afirmando que es la derecha y los grandes empresarios del sector de pensiones quienes deben ceder para lograr un acuerdo. Subrayó que, si se alcanza un consenso, será debido a la decisión de estos sectores de colaborar, caso contrario, advirtió: "será extraordinariamente complejo para el país. La ciudadanía debe saber que hay un sector que se niega a avanzar en esta materia".

Como un punto final a sus declaraciones, el político comunista calificó como un "error" no haber movilizado a la sociedad para respaldar la reforma de pensiones, subrayando la importancia de la participación democrática en las calles. "Esto no es solo una cuestión de protesta, sino de movilizaciones que son esenciales para la democracia. En el mundo entero, incluidas las grandes potencias como Estados Unidos, hay manifestaciones, como las que hemos visto por Gaza", concluyó Lagos.

La apertura al diálogo sobre las pensiones y el reconocimiento de errores pasados podrían marcar un nuevo camino en las discusiones políticas en el país, especialmente en un contexto donde la reforma a pensiones es más urgente que nunca. Sin duda, la pregunta que queda es: ¿lograrán finalmente los líderes políticos llegar a un acuerdo que beneficie a todos los chilenos?