Recientes investigaciones científicas han analizado el tiempo de ejercicio necesario para contrarrestar los efectos perjudiciales del sedentarismo, y los resultados son sorprendentes. Aunque algunas fuentes afirman que se requieren entre 60 y 75 minutos de actividad física diaria, un metaanálisis más reciente sugiere que la cifra podría ser mucho más baja.

¿Cuánto ejercicio realmente necesitamos?

Entonces, ¿cuánto ejercicio realmente necesitamos para disminuir el riesgo de muerte asociado a un estilo de vida sedentario?

Un exhaustivo metaanálisis publicado en 2020, que abarcó datos de más de 44,000 personas de cuatro países diferentes, arroja luz sobre esta cuestión. Este estudio utilizó métodos estadísticos avanzados para evaluar cómo diferentes niveles de actividad física influían en el riesgo de muerte. Durante el periodo de estudio, se registraron 3,451 muertes, lo que representa un 7.8% de la muestra analizada.

Los participantes pasaban entre 8.5 y 10.5 horas al día realizando actividades sedentarias, mientras que la cantidad de ejercicio moderado a vigoroso se limitaba a un rango de 8 a 35 minutos diarios. Los resultados fueron impactantes: el grupo con el menor nivel de actividad física y mayor sedentarismo presentó un riesgo de muerte hasta un 263% mayor en comparación con el grupo más activo. Por otro lado, aquellos que se mantenían activos no mostraron un aumento significativo en el riesgo de mortalidad, a pesar de que pasaban más tiempo sentados.

Importancia de cualquier actividad física

Es fundamental entender que cualquier cantidad de actividad física puede ser beneficiosa. Incluso pequeños incrementos en la actividad diaria pueden contribuir a mejorar la salud y reducir el riesgo de enfermedades crónicas. Se recomienda, además, adaptar las rutinas de ejercicio a cada estilo de vida, incorporando actividades que sean disfrutables y sostenibles. ¿Estás listo para dejar atrás el sedentarismo? ¡Es hora de moverte y cuidar tu salud!

No olvides que el primer paso suele ser el más difícil, pero cuenta con múltiples beneficios que transformarán tu vida. Puedes comenzar por caminar, hacer ejercicios en casa o inscribirte en una clase local. La clave está en ser constante y encontrar diversión en la actividad física.