El cerebro es el órgano encargado de regular nuestro comportamiento, así como de albergar emociones y pensamientos, según el Instituto Mexicano del Seguro Social. Para garantizar su salud es fundamental seguir algunas pautas que han sido objeto de investigaciones científicas.

Desde la Universidad Favaloro en Argentina, se sostiene que estimular el cerebro es viable en cualquier etapa de la vida, gracias a la llamada "plasticidad neuronal". A pesar de que el envejecimiento es inevitable, existen herramientas a nuestro alcance para cuidar nuestra mente y mantenerla activa.

HÁBITOS PARA CUIDAR DEL CEREBRO

La Asociación de Alzheimer ha establecido que las acciones cotidianas positivas pueden impactar significativamente en la salud del cerebro y reducir el riesgo de deterioro cognitivo, así como de enfermedades como el Alzheimer y la demencia. Por ello, sus expertos recomiendan adoptar hábitos saludables.

Un estudio del Instituto Karolinska en Suecia ha evidenciado que la salud vascular es crucial para mantener un cerebro joven. Los investigadores han observado que un cerebro con apariencia envejecida está vinculado a factores como accidentes cerebrovasculares, inactividad física y diabetes. Aquí algunas recomendaciones imprescindibles:

1. Seguir una alimentación saludable

La dieta mediterránea es reconocida por sus beneficios en la salud cerebral. Se aconseja incluir alimentos ricos en ácidos grasos Omega 3 y antioxidantes en tu dieta.

2. Hidratación adecuada

Es recomendable consumir entre 2 y 2.5 litros de agua al día para mantener una buena función cerebral.

3. Ejercicio físico regular

Actividades como nadar, caminar o correr favorecen la circulación sanguínea y son esenciales para las funciones cognitivas.

4. Estimulación cognitiva constante

La socialización y la adquisición de nuevos conocimientos son clave para mantener el cerebro activo y saludable.

5. Descanso de calidad

La calidad del sueño es fundamental. Se recomienda dormir entre 7 y 8 horas diarias.

6. Controles auditivos periódicos

Realizar chequeos auditivos con regularidad es importante, ya que la pérdida de audición puede incrementar el riesgo de demencia.

7. No fumar

Fumar aumenta las probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular, afectando así la salud cerebral.

8. Manejo del estrés

Gestionar adecuadamente el estrés es vital para proteger el cerebro y la salud en general.

9. Moderación en el uso de tecnología

Utilizar la tecnología de manera excesiva puede interferir en nuestro descanso y afectar negativamente nuestras funciones cerebrales.

10. Controlar factores de riesgo cardiovascular

Es crucial vigilar el peso corporal, la presión arterial y los niveles de colesterol, manteniendo un estilo de vida sano.

Siguiendo estas recomendaciones, no solo podemos mantener nuestro cerebro en forma, sino también prevenir muchas enfermedades relacionadas con la edad. La ciencia continúa avanzando en este campo y cada vez más se confirma que con hábitos saludables, es posible mantener una mente ágil y activa hasta en la tercera edad.