¿Por qué las mujeres dicen 'no' a los hombres? La ciencia detrás del rechazo sexual
2024-11-26
Autor: Benjamín
El comportamiento de las hembras mamíferas, como los roedores, revela un fascinante mecanismo que las lleva a aceptar avances sexuales únicamente durante su fase fértil, rechazando a los machos en otros momentos. Este importante hallazgo es parte de una investigación dirigida por Susana Lima, jefa del Laboratorio de Neuroetología, quien aclara que ‘el rechazo sexual no es solo la falta de receptividad, sino un comportamiento activo’. Los estudios se centran en el hipotálamo ventromedial (VMH), una región cerebral crucial que gestiona el comportamiento social y sexual, no solo en roedores, sino también en humanos. Lima y su equipo habían especulado sobre la existencia de células específicas en el VMH encargadas del rechazo, basándose en experimentos previos que mostraron su activación tanto durante la aceptación como el rechazo de avances masculinos.
Particularmente intrigante es su trabajo en el VMH anterior, donde identificaron neuronas que responden a la hormona progesterona, la cual varía durante el ciclo reproductivo. Según el investigador Nicolás Gutiérrez-Castellanos, entender cómo el cerebro interrumpe estos estados de comportamiento ‘es crucial para comprender cómo se integran las señales del entorno y del cuerpo’. A través de tecnologías avanzadas como la fotometría de fibra, el equipo observó interacciones entre hembras receptivas y no receptivas con machos. Sorprendentemente, las neuronas del VMH anterior se mostraron altamente activas en hembras no receptivas, lo cual se correlacionó con conductas defensivas. En contraste, en hembras receptivas, su actividad era notoriamente baja, permitiendo así la aceptación de los machos.
Basma Husain, coautora principal del estudio, señala que estas neuronas actúan como ‘guardianes del rechazo sexual’. Al estar fuera del período fértil, su activación induce comportamientos de rechazo, mientras que durante la fertilidad, su actividad disminuye, facilitando el apareamiento. ¿Cómo se activan o desactivan estas neuronas? Los experimentos de electrofisiología revelaron que las hembras no receptivas reciben más señales excitatorias, mientras que las receptivas reciben señales inhibidoras, lo que demuestra la flexibilidad del cerebro.
Además, el uso de la optogenética permitió a los investigadores confirmar que activar artificialmente estas neuronas puede provocar conductas de rechazo incluso durante la fertilidad, lo que indica la existencia de dos poblaciones neuronales en el VMH que regulan respectivamente el rechazo y la receptividad. Esta complejidad neuronal sugiere que el cerebro femenino está diseñado para maximizar la probabilidad de concepción al tiempo que minimiza riesgos como depredadores y enfermedades.
Husain agregó que este sistema de dos ‘perillas’ permite al cerebro regular los comportamientos sexuales de manera más sofisticada. Curiosamente, hallazgos recientes sugieren que en el VMH posterior también se observan variaciones similares, pero en la dirección opuesta: las neuronas están activas durante la fase fértil y menos activas fuera de ella.
Lima concluyó que el VMH también existe en los seres humanos, posiblemente cumpliendo funciones análogas. Estudios recientes en modelos de ratones han mostrado que el VMH puede alterarse en condiciones patológicas como el síndrome de ovario poliquístico. Además, el aislamiento social en hembras jóvenes puede afectar su receptividad sexual, resaltando la relevancia clínica del VMH en la comprensión de comportamientos y disfunciones sexuales.