
¿Por qué Trump quiere construir más barcos en Estados Unidos?
2025-03-25
Autor: Joaquín
El presidente Donald Trump ha comenzado a poner en práctica un ambicioso plan que incluye la imposición de nuevas tarifas multimillonarias a los buques portacontenedores provenientes de China. Estas tarifas, según la administración, están diseñadas para combatir las prácticas comerciales que ellos consideran desleales, las cuales han permitido que China lidere en la construcción de embarcaciones comerciales.
De acuerdo al Washington Post, el objetivo es que cobrar en los puertos estadounidenses a los barcos de propiedad o construcción china desincentive a los transportistas marítimos a adquirir más barcos de ese origen. La administración Trump prevé que una porción de los ingresos provenientes de estas tarifas se destine a subsidiar la industria de construcción naval estadounidense, que ha estado en declive durante décadas.
Este plan incluye medidas que obligarían a los exportadores a cumplir objetivos de envío en buques con bandera estadounidense, anticipándose a que este cambio podría hacer aumentar de forma significativa los envíos de productos en estos barcos nacionales.
Sin embargo, la respuesta de los expertos del sector marino ha sido en su mayoría escéptica. Algunos han advertido que recuperar la construcción naval estadounidense podría requerir décadas de apoyo constante por parte del gobierno, algo que no se ve claramente en el horizonte.
El plan de Trump ha sido criticado por especialistas como Lars Jensen, director ejecutivo de Vespucci Maritime, quien señala que la imposición de tarifas elevadas sin alternativas estadounidenses disponibles solamente incrementará los costos del transporte y afectará la eficiencia de la cadena de suministro global.
Además, la propuesta contempla la creación de una nueva oficina dentro de la Casa Blanca que se encargue de regular las tarifas y monitorear el impacto de las nuevas políticas comerciales. Cada escala de un barco chino en un puerto estadounidense podría ser gravada con un impuesto adicional, y se evaluaría el porcentaje de la flota que esté compuesta por buques construidos en China para determinar tarifas adicionales.
La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) ha declarado que estas medidas buscan eliminar el dominio de la industria marítima china, pero los analistas advierten que esto puede llevar a que los transportistas busquen evadir estos costos trasladando operaciones a otros mercados, como puertos canadienses o mexicanos, lo que dañaría a los trabajadores portuarios y camioneros en Estados Unidos.
Desde la industria del transporte, la preocupación es palpable. Pequeños transportistas que dependen de contratos a largo plazo con barcos de construcción china podrían verse particularmente afectados, pues enfrentan un futuro incierto. La incertidumbre en los costos ya ha llevado a algunos operadores a cancelar contratos y retrasar negociaciones en puertos estadounidenses.
Según el presidente del Consejo Mundial de Transporte Marítimo, el plan de Trump podría resultar en una congestión similar a la sufrida durante la pandemia de Covid-19 en principales puertos como Los Ángeles y Nueva York.
Un borrador de un documento ejecutivo con fecha del 27 de febrero propone una serie de medidas adicionales, incluyendo tarifas de envío y aranceles sobre el equipo de manipulación de carga proveniente de China. Este documento también señala la urgencia de revitalizar las industrias marítima y de construcción naval de Estados Unidos, haciendo un llamado al Congreso para que identifique fuentes de financiación específicas para nuevos proyectos de construcción naval.
Durante su discurso en el Congreso el pasado 4 de marzo, Trump remarcó su intención de recuperar la grandeza de la industria naval estadounidense, afirmando: 'Solíamos fabricar muchísimos barcos. Ya no los fabricamos con tanta frecuencia, pero los fabricaremos muy rápido, muy pronto.' Sin duda, este ambicioso plan de revitalización naval plantea más preguntas que respuestas en un sector que enfrenta retos históricos y un contexto global complicado.