La conexión entre la psicología y las decisiones financieras no es un tema nuevo, pero ha sido profundizado por expertos como Bradley Klontz, psicólogo y profesional en el ámbito financiero. Klontz, profesor en la Universidad de Creighton y cofundador del Instituto de Psicología Financiera, lo describe a menudo como un intrincado juego entre nuestras antiguas creencias familiares y nuestras actuales elecciones económicas.

Los ‘guiones financieros’, que son creencias heredadas de nuestro entorno familiar, pueden convertirse en obstáculos serios que afectan tanto nuestro bienestar financiero como emocional. Klontz ha identificado cuatro patrones psicológicos que, aunque nacen de contextos comprensibles, pueden transformarse en verdaderas trampas.

El primer bloqueo

Este patrón consiste en rechazar el dinero o su importancia, viéndolo como algo negativo o incluso inmoral. Klontz explica que frecuentemente esto es el resultado de experiencias negativas relacionadas con la pobreza o convicciones sobre la corrupción asociada a la riqueza. Este obstáculo no solo impide la planificación financiera efectiva, sino que también cierra las puertas a oportunidades de crecimiento económico.

El segundo bloqueo

Muchos creen erróneamente que acumular dinero resolverá todos sus problemas. Este patrón, más visible entre quienes enfrentan severas deudas, genera un ciclo de insatisfacción y dependencia financiera, reafirmando la idea de que el dinero es la solución mágica a todos los males.

El tercer bloqueo

La asociación del valor personal con el dinero es otro fenómeno común. Aquellos que han crecido en condiciones de pobreza tienden a ver los bienes materiales como un símbolo de éxito y validación social. Esto puede llevar a un estilo de vida insostenible y a una constante búsqueda de aprobación externa.

El cuarto bloqueo

La hipervigilancia financiera, donde la preocupación excesiva por ahorrar se convierte en una ansiedad paralizante. Si bien es esencial contar con un fondo de emergencias, la obsesión por el ahorro puede afectar negativamente la calidad de vida y la capacidad para disfrutar de los recursos disponibles.

Estos patrones no surgen de la nada; muchas de nuestras creencias sobre el dinero son el reflejo de lo que vivieron nuestros antepasados. Klontz comparte el caso de su abuelo, que, después de perderlo todo en la Gran Depresión, desarrolló una aversión hacia los bancos que influenció negativamente en las decisiones financieras de su familia durante generaciones.

También se presenta el caso de un venezolano que, habiendo crecido en un ambiente de hiperinflación, aprendió a gastar rápidamente cualquier ingreso, temeroso de que su valor se desvaneciera. Aunque esta estrategia era adecuada en su contexto original, se convirtió en un problema al establecerse en un lugar con estabilidad económica, donde debía reconsiderar su relación con el dinero.

Para romper con estas limitaciones psicológicas, Klontz sugiere un proceso en tres etapas: Primero, reconocer las creencias que hemos heredado. Pregúntate: "¿Qué opinaban mis padres sobre el dinero?" Identificar estos patrones puede aclarar muchas decisiones que tomas hoy.

Luego, evalúa si estas creencias todavía son efectivas. Es necesario cuestionar si estas ideas contribuyen a tu bienestar financiero o si te están frenando. Finalmente, trabaja en reescribir tu narrativa financiera. Si identificas creencias negativas, es crucial sustituirlas por afirmaciones más positivas y constructivas. Por ejemplo, cambiar la idea de que "deber es igual a miseria" por "algunas deudas pueden ser útiles si se manejan adecuadamente".

Sobreponerse a estos bloqueos financieros exige introspección y un renovado compromiso para transformar esos patrones negativos. Como bien destaca la investigación de Klontz, reconocer estos orígenes y reescribir nuestras creencias acerca del dinero no solo mejora nuestra relación con las finanzas, sino que también promueve estabilidad emocional y social, llevando a una vida más saludable y equilibrada.

Así que no te quedes atrapado en las viejas creencias familiares; da un paso hacia tu libertad financiera hoy!