Muchos viajan a diario en el transporte público, y es común que el cansancio haga que nos quedemos dormidos en el bus. Pero, ¿por qué parece que algunas personas logran despertarse justo a tiempo en su destino?

Investigaciones recientes han abordado este interesante fenómeno. Según el Dr. Marc I. Leavey, especialista en atención primaria, nuestro cuerpo tiene la capacidad de adaptarse a una rutina, y eso incluye los horarios de los buses que tomamos habitualmente. Esto significa que con el tiempo, nuestro reloj biológico se sincroniza con la parada específica donde normalmente bajamos. El Dr. Leavey explica: "El cuerpo es capaz de aprender una rutina. Siempre que haya una rutina, es más fácil para el cuerpo reaccionar".

Por otro lado, el Dr. Ronald Chervin, neurólogo y especialista en trastornos del sueño, sugiere que aunque estemos dormidos, seguimos recibiendo estímulos del entorno, como los anuncios de las paradas. El cerebro puede captar estos sonidos y, a través de ellos, hacer que la persona despierte justo a tiempo. Chervin menciona: "La mente está alerta a ciertos estímulos a pesar de que estés dormido, como escuchar tu nombre".

Además, el neurólogo plantea la posibilidad de que algunas personas no se duerman profundamente, sino que se encuentren en un estado de sueño ligero, despertándose brevemente en cada parada para evaluar si es la suya, y luego volviendo a dormir.

Pero, ¿qué pasa con aquellos que no tienen la misma suerte y se pasan de su parada? No todos tienen la habilidad de despertarse automáticamente. Muchos dependen de alarmas o de la atención de otros pasajeros. La dificultad para despertarse puede estar relacionada con el ciclo del sueño. Según el Dr. Leavey, "despertar durante el sueño REM puede ser muy complicado, y aquellos que están en una fase de sueño profundo son los más propensos a perderse su parada".

Además, el sueño insuficiente de la noche anterior puede incrementar la dificultad para levantarse a tiempo. "Aquellos de nosotros que tenemos menos horas de sueño algunas veces caen más rápidamente en las etapas más profundas del sueño, lo que hace más difícil despertarse".

Expertos sugieren que, como medida preventiva, el uso de alarmas puede ser beneficioso mientras el cuerpo se acostumbra a la rutina de despertarse en la parada correcta. Así que la próxima vez que te subas a un bus, recuerda que no estás solo; hay una ciencia detrás de esos mágicos momentos de despertar justo a tiempo.