La tragedia se desató en Guillena, Sevilla, cuando la explosión de la batería de un teléfono móvil en carga causó un voraz incendio que costó la vida a cuatro miembros de una misma familia el pasado domingo.

Según la información de la Guardia Civil, el incendio se originó en la planta baja de una vivienda de dos alturas, y tras una exhaustiva investigación, los agentes han descartado la hipótesis inicial de que una batería de patinete eléctrico fuese la culpable. En cambio, los nuevos indicios apuntan a un fallo en un teléfono móvil como la verdadera causa del desastre.

Los investigadores hallaron los restos del dispositivo en el sofá del salón, confirmando que el fuego comenzó ahí. Tres factores combinados llevaron a esta tragedia: la explosión de la batería, la ubicación en la planta baja que facilitó la propagación hacia arriba y la inflamabilidad del sofá, que avivó rápidamente las llamas.

Manuel Blanco, sargento de Bomberos de la Diputación de Sevilla, afirmó que este tipo de baterías, que suelen ser de litio, pueden resultar peligrosas si no se utilizan adecuadamente. Se alertó sobre la importancia de evitar que los móviles se calienten excesivamente y se respeten los tiempos de carga indicados por los fabricantes. “Si el móvil carga en cinco horas, no debería dejarse toda la noche conectado”, advirtió Blanco.

Es esencial tener en cuenta que una explosión de tal magnitud no ocurre por un uso ocasional incorrecto, sino que requiere descuidos prolongados en el tiempo con el dispositivo.

Este incendio se ha convertido en uno de los más devastadores en la historia reciente de España, siendo el segundo más fatal en 2024, solo superado por un siniestro en Campanar, Valencia, donde murieron diez personas. En los últimos 20 años, este caso se une a una lista trágica en la provincia de Sevilla, que incluye un incendio en Écija en 2008 que dejó seis muertos, y otro en Arahal en 2014 que cobró cuatro vidas, entre ellas la de un niño de solo 11 años.

Este alarmante incidente subraya la importancia de la seguridad en el hogar y el correcto uso de los dispositivos electrónicos. Las autoridades instan a la población a estar alerta y seguir los consejos de seguridad para prevenir tragedias en el futuro.