Un teólogo y supuesto abusador: Horror en Chillán por la explotación de una hijastra
2024-12-13
Autor: Pedro
Un escalofriante caso de abuso sexual y explotación se ha destapado en Chillán, ciudad de la región de Ñuble, donde un teólogo adventista está bajo investigación por haber sometido a su hijastra a una red de pedofilia durante más de una década.
La víctima, ahora estudiante universitaria, relató que este individuo le impartió clases particulares desde que tenía apenas siete años, aprovechándose de su posición de confianza para mostrarle material pornográfico y abusarle sexualmente desde los ocho años. "Él me tocaba... cosas así", confesó la joven, quien luchó por salir del ciclo de abuso impuesto por su 'padrastro'.
Este hombre, de 64 años y que se presentaba como un modelo de familia, fue arrestado tras una investigación que reveló su doble vida. Era conocido en la comunidad por su labor docente en colegios y por su trabajo en una cárcel, donde predicaba sus creencias religiosas. Sin embargo, bajo esta fachada, se escondía un depredador sexual que organizaba encuentros para que otros hombres abusaran de su hijastra.
La investigación, liderada por fiscalía, identificó a al menos 13 cómplices en una red de pedofilia, documentados en más de 130 videos y más de 16 mil fotografías de pornografía infantil. El teólogo fue imputado por 14 cargos de abuso y violación, acciones que van desde actos de abuso sexual hasta la entrega deliberada de su hijastra a otros hombres. Para colmo, aún hay un número desconocido de cómplices que podrían estar involucrados.
Un aspecto perturbador del caso es la manipulación psicológica que ejercía sobre la víctima. Según el fiscal Florentino Bobadilla, el criminal utilizaba tácticas manipulativas para someter a la joven a su voluntad, creando un clima de terror emocional. "Él le decía: '¡Hazlo!', y para no defraudarlo, la niña se sentía obligada a complacerlo", relató Bobadilla.
La joven, cuyo nombre se mantiene en anonimato para proteger su identidad, recordó que siempre temía ser objeto de burlas sobre su apariencia física si no cumplía con las expectativas de su abusador. La pesadilla se extendió hasta que cumplió 19 años, momento en el cual agotada y traumatizada logró romper el silencio que la había mantenido atrapada por años.
Cabe señalar que de los 14 hombres acusados, cinco ya han sido condenados por su participación en la producción y almacenamiento de material pornográfico infantil. El próximo sábado, se anunciarán las penas que enfrentarán, que podrían ir desde ocho años de prisión hasta cadena perpetua simple.
Este caso ha sacudido a la comunidad de Chillán, abriendo un debate sobre la prevención del abuso infantil y la responsabilidad de las instituciones al respecto. Los expertos insisten en la importancia de crear espacios seguros donde las víctimas puedan reportar estos delitos sin miedo a represalias.
Las autoridades continúan la investigación y han extendido su búsqueda para identificar a más implicados en esta red de abusadores que operaba encubierta en la sociedad, evidenciando la necesidad de una vigilancia activa en todas las comunidades.