La campaña de vacunación contra el virus respiratorio sincitial (VRS) ha dado grandes pasos en Canarias, logrando inmunizar a 4.284 bebés hasta el momento. Esto significa que hay 965 pequeños más protegidos en comparación con la octava semana de este año, un impresionante aumento del 22,53% respecto al mismo período de 2023, de acuerdo con la Consejería de Sanidad del Gobierno canario.

El VRS es el principal causante de infecciones agudas en las vías respiratorias inferiores en bebés menores de un año, provocando condiciones graves como la bronquiolitis y la neumonía. Antes de esta intervención, no existían medidas farmacológicas ampliamente disponibles para la prevención, como los anticuerpos monoclonales, lo que hacía que la situación fuera aún más crítica.

Esta es la segunda temporada en la que se implementa esta importante campaña de inmunización en las islas. En la edición anterior, se demostró su eficacia al reducir considerablemente el número de hospitalizaciones por bronquiolitis entre los pequeños que recibieron la vacuna. Sanidad asegura que esta intervención ha transformado la atención pediátrica en la región.

La fácil transmisión del VRS es motivo de preocupación, ya que puede propagarse rápidamente en espacios comunitarios como guarderías y escuelas. Por ello, la Consejería de Sanidad anima a todos los padres a vacunar a sus hijos. La vacuna, nirsevimab, ahora autorizada por la Comisión Europea, ha superado todos los requerimientos técnicos y es esencial para proteger a los más vulnerables.

Los centros de salud y hospitales del SCS son claves en este proceso, directamente inmunizando a los bebés en virtud del contacto previo con los padres. Mientras que los recién nacidos reciben el anticuerpo en hospitales, aquellos menores de seis meses obtienen la vacuna en los centros de salud durante la temporada de inmunización.

Según los pediatras, la vacunación ha sido un cambio radical en el número de casos de bronquiolitis atendidos en las consultas. La reducción de casos ha sido notable, resultando en síntomas más leves y un descenso en los ingresos hospitalarios. Expertos especializados sugieren que el tratamiento no solo protege contra el VRS, sino que también podría disminuir el riesgo de neumonías bacterianas.

Es crucial recordar que la bronquiolitis es la segunda causa de muerte entre los lactantes en el mundo, solo superada por la malaria. "El 70% de las hospitalizaciones en unidades de cuidados intensivos pediátricos se deben al VRS", advirtió un experto médico en la materia, enfatizando que proteger a los bebés de este virus puede ser una cuestión de vida o muerte, especialmente durante los meses de otoño e invierno. ¡La vacunación es el camino hacia un futuro más seguro para nuestros pequeños!