Las manchas oscuras en la zona del labio superior, comúnmente conocidas como melasma o ‘sun moustache’, representan una preocupación estética para muchas personas, especialmente las mujeres. Este tipo de hiperpigmentación, que puede ser difícil de tratar, ha llevado a la creciente demanda en las clínicas de dermatología y medicina estética. La Dra. Beatriz Beltrán, fundadora de la Clínica Beatriz Beltrán, explica que el melasma se presenta como una mancha grande y difusa con bordes irregulares, en contraste con los léntigos solares, que son más pequeños y bien definidos.

El melasma puede aparecer en diferentes áreas del rostro, pero, sin duda, su localización en el área del bigote resulta particularmente incómoda para quienes lo padecen. De acuerdo con Estefanía Nieto, directora dermocosmética de Medik8, la prevención es la clave, aunque una vez que aparecen, los tratamientos con cosméticos despigmentantes y la constancia en el uso de estos productos son esenciales para combatir las manchas persistentes.

¿Sabías que entre un 8.8% y un 40% de la población sufre de melasma? Esta afección tiene una prevalencia notablemente mayor en mujeres y aquellos de fototipos altos, como lo indica la Dra. Mar Mira de la Clínica Mira+Cueto. Se estima que entre el 14,5% y el 56% de las mujeres embarazadas enfrentan esta problemática, al igual que un 11,3% al 46% de las que usan anticonceptivos orales.

Los factores que contribuyen al melasma son variados e incluyen predisposición genética, factores hormonales y exposición al sol. La Dra. Raquel González, directora técnica de Perricone MD, enfatiza que la exposición solar, no solo la radiación ultravioleta sino también la luz visible y azul, juega un papel crucial. Por eso, es fundamental el uso de protección solar a diario, ya que el sol activa la producción de melanina, intensificando las manchas. Según Mireia Fernández, directora dermocosmética de Boutijour, es vital aplicar un protector solar adecuado que ofrezca protección contra los rayos UVA y UVB, así como de la luz azul, algo que se ha vuelto particularmente relevante tras el aumento de tiempo frente a pantallas en tiempos de pandemia.

¿Te has preguntado qué puedes hacer además de protegerte del sol? La incorporación de antioxidantes como la vitamina C, E y niacinamida, así como el uso de retinoides y ácidos exfoliantes como el glicólico y el láctico, resulta fundamental. Estos ingredientes ayudan a eliminar células muertas y promueven la renovación celular, vital para reducir la hiperpigmentación. Sin embargo, se debe tener especial cuidado durante el embarazo, donde alternativas más suaves como el oxyresveratrol son recomendadas.

Cuando se trata de ocultar las manchas, ¡el maquillaje puede ser tu mejor amigo! Correctores y bases de maquillaje de alta cobertura pueden ayudar a disimular el melasma. La clave es aplicar preparaciones con tonos melocotón, que neutralizan la oscuridad de las manchas.

Finalmente, si estás considerando opciones más invasivas, existen tratamientos como peelings, mesoterapia con ácido tranexámico y láser que han demostrado ser eficaces, aunque se debe ser consciente de que los resultados no son inmediatos y el melasma puede reaparecer con el tiempo. ¡Consulta siempre con un dermatólogo para encontrar el mejor camino según tus necesidades específicas!

En resumen, el melasma es una condición compleja, pero con el enfoque adecuado en la prevención, cuidado y tratamiento, puedes decirle adiós a esas manchas oscuras y recuperar la luminosidad de tu piel.