
¡Alerta en España! Los neurólogos revelan un nuevo síntoma que podría predecir el Alzheimer temprano justo en la ducha
2025-03-20
Autor: David
Según la Asociación de Alzheimer, el Alzheimer es un trastorno cerebral degenerativo que afecta la memoria, las habilidades cognitivas, el comportamiento y la personalidad, convirtiéndose en una de las principales causas de demencia en personas mayores. Los síntomas de esta enfermedad suelen aparecer de manera lenta, pero afectan significativamente las tareas diarias y la calidad de vida de quienes la padecen.
En España, alrededor de 800.000 personas están diagnosticadas con esta enfermedad, y se detectan aproximadamente 40.000 nuevos casos cada año. Es fundamental subrayar que solo cerca del 1% de los pacientes tienen antecedentes genéticos que sugieren una predisposición a desarrollar Alzheimer, lo que hace aún más importante el diagnóstico temprano y la prevención mediante hábitos de vida saludables.
Investigaciones recientes de la Universidad de Chicago han revelado un nuevo método sorprendente para detectar síntomas tempranos de Alzheimer: la ducha. Uno de los indicadores más notables es la pérdida del sentido del olfato, que se ha relacionado con problemas de memoria. Por ejemplo, si alguien tiene dificultad para reconocer el aroma del gel de baño mientras se ducha, esto puede ser un indicativo de deterioro sensorial ligado a la enfermedad.
El bulbo olfatorio, responsable de percibir olores, está estrechamente conectado al sistema límbico del cerebro, que regula las emociones y la formación de recuerdos. Por lo tanto, reconocer la disminución de la capacidad olfativa en personas de mediana edad podría facilitar su inclusión en ensayos clínicos, permitiendo así el desarrollo de tratamientos más efectivos.
Rachel Pacyna, autora del estudio, enfatiza: "Si pudiéramos identificar a individuos de 40 a 60 años con mayor riesgo temprano, tendríamos una base sólida para inscribirlos en ensayos clínicos y avanzar en la creación de medicamentos innovadores".
Además, otro estudio publicado en la revista Neurology apoya esta teoría, sugiriendo que aquellos con la variante genética APOE e4 podrían experimentar una pérdida del olfato antes que la población general. Este hallazgo podría ser clave en la detección temprana de problemas cognitivos y demencia.
Los tests realizados a más de 865 personas mostraron que los portadores de esta variante genética tenían un 37% menos de probabilidades de detectar olores que aquellos que no la tenían. La capacidad para identificar olores comenzó a disminuir notablemente entre los 65 y 69 años, un periodo crítico en la búsqueda de intervenciones preventivas.
Los primeros síntomas a tener en cuenta incluyen dificultades para realizar tareas cotidianas, problemas de concentración y confusión sobre el tiempo o la ubicación, así como alteraciones en el lenguaje y el juicio.
Por último, los cambios en el estado de ánimo y la personalidad, tales como la depresión o la ansiedad, son síntomas que también pueden manifestarse en las etapas iniciales de la enfermedad. Este es un llamado a la acción: ¡presta atención a tu salud mental y física, ya que la detección temprana puede cambiar el curso de esta devastadora enfermedad!