La Inspección de Trabajo ha lanzado una ambiciosa campaña para combatir los contratos a tiempo parcial fraudulentos, enviando un total impactante de 124.300 cartas a empresas donde se han identificado posibles abusos. Este alarmante descubrimiento se ha realizado mediante un cruce masivo de datos, revelando irregularidades en cerca de 240.000 contratos. Su objetivo es evidenciar las verdaderas jornadas de trabajo de los empleados en este régimen.

Según la Inspección de Trabajo, se han emitido exactamente 124.331 comunicaciones que afectan a 239.767 relaciones laborales. Este fenómeno desvela una preocupante realidad, ya que el 73% de los contratos a tiempo parcial afectan a mujeres, muchas de las cuales preferirían contar con un empleo a jornada completa.

Esta iniciativa forma parte del Plan de Choque contra el fraude en la contratación a tiempo parcial para el año 2024. Recientemente, también se lanzó una campaña similar enfocada en las irregularidades en contratos temporales y fijos discontinuos.

La Inspección de Trabajo realiza estas campañas enviando notificaciones a las empresas que han sido identificadas con presuntos fraudes basados en el análisis de datos. Las empresas tienen un plazo para regularizar los contratos cuestionados o presentar pruebas que respalden su legalidad. Si ignoran el aviso informativo o sus explicaciones no convencen a las autoridades, la Inspección actuará para verificar el cumplimiento de la normativa laboral.

El éxito de este tipo de intervenciones es significativo, como se evidenció en 2022, cuando el último plan de choque práctico resultó en un aumento de la jornada laboral para 47.190 relaciones laborales. Igualmente, el plan de choque de 2019 logró una modificación similar para 40.765 casos.

Este tipo de medidas son cruciales para proteger los derechos de los trabajadores y garantizar un mercado laboral más justo. La presión sobre las empresas ahora es más fuerte que nunca, y es un recordatorio de que la legalidad y la ética deben prevalecer en la contratación laboral.