En los últimos meses, han proliferado diversas estafas diseñadas para robar información y dinero a través de nuestros dispositivos móviles. Este fenómeno se agudiza con la aparición de estafadores que se hacen pasar por organismos oficiales, como la Dirección General de Tráfico, con el objetivo de engañar a sus víctimas haciéndoles creer que deben pagar multas falsas.

Sin embargo, ahora ha emergido una nueva modalidad de estafa que directamente ataca a los conductores en gasolineras. A diferencia de las estafas típicas en línea, este timo ocurre en persona, lo que lo convierte en un peligro no solo financiero, sino también físico. La situación es especialmente alarmante ya que lo que comienza como una simple solicitud podría convertirse en un escenario de vulnerabilidad extrema.

El cebo: un billete de cinco euros

Los casos recientes se han reportado principalmente en gasolineras que operan las 24 horas, especialmente en Francia. La estructura de esta estafa es ingeniosa. Los delincuentes seleccionan estaciones de servicio que solo aceptan pagos con tarjeta, creando la necesidad del efectivo entre los conductores.

Galante, pero engañoso, estos estafadores se acercan a las víctimas ofreciendo un billete de cinco euros a cambio de ayuda para llenar su tanque vacío. Por supuesto, el truco está en que una vez que las víctimas comienzan a llenar el vehículo del delincuente, la situación se torna amenazante. Los estafadores fuerzan a las personas a empezar a llenar mucho más que la cantidad inicial, presionando y, en algunos casos, utilizando violencia física para lograrlo.

Cómo protegerte de este peligro

Para reducir el riesgo de caer en esta trampa, se recomienda evitar repostar en gasolineras desiertas, especialmente durante la noche. Estos lugares suelen contar con menos vigilancia, haciéndolos un blanco fácil para los delincuentes. Además, es fundamental rechazar cualquier solicitud de ayuda de desconocidos. Si te encuentras en medio de esta situación, intenta memorizar la matrícula y detalles del vehículo del estafador para poder reportarlo a las autoridades.

Desafortunadamente, en muchos casos, los vehículos utilizados por los estafadores son robados, lo que complica aún más la identificación de los culpables.

Precauciones adicionales en la carretera

Esta nueva modalidad de estafa no es un caso aislado. Recientemente, también se ha difundido la estafa del motorista, donde varios delincuentes utilizan tácticas engañosas para estafar a los conductores. En esta situación, un motorista frena a un automóvil bajo la excusa de hacer una consulta mientras otro se encarga de provocar un choque. Esta maniobra es planificada para obtener compensaciones por daños que nunca ocurrieron realmente.

Por lo tanto, la prevención es clave. Mantente alerta y comparte información sobre estos timos para proteger a tus amigos y familiares. En un mundo donde la creatividad del crimen parece no tener límites, cuidemos de nuestra seguridad y economía.