En los últimos años, la tasa de supervivencia de los pacientes con cáncer de pulmón ha aumentado notablemente, lo que ha llevado a un nuevo enfoque en cómo se aborda esta enfermedad. Con el objetivo de analizar las necesidades emergentes de estos supervivientes, se ha presentado el informe "Situación y necesidades del superviviente de cáncer de pulmón", un proyecto colaborativo promovido por Roche, que incluye la participación de médicos, pacientes y gestores de salud.

Hablando de la importancia de este documento, Bernard Gaspar, presidente de la Asociación Española de Afectados de Cáncer de Pulmón (AEACaP), asegura que este informe es fundamental para identificar y satisfacer las complejas necesidades médicas, psicológicas y sociales de aquellos que han superado la enfermedad. "La calidad de vida de estos pacientes no depende únicamente de la remisión de la enfermedad, sino de una atención integral que abarque todos los aspectos de su vida", explica Gaspar.

El rol de las asociaciones de pacientes como GEPAC (Grupo Español de Pacientes con Cáncer) es crucial en este contexto. Su presidenta, Begoña Barragán, enfatiza que la supervivencia comienza desde el momento del diagnóstico y se extiende mucho más allá del tratamiento activo. "Se trata de vivir con calidad y dignidad, teniendo acceso a los recursos necesarios que faciliten la reintegración en la vida social y laboral", afirma.

Uno de los principales retos es la reinserción social y laboral de los supervivientes de cáncer de pulmón. De acuerdo a los datos, este tipo de cáncer representa el 12.4% de los casos diagnosticados en todo el mundo y es la principal causa de mortalidad por esta enfermedad. Las razones de su creciente incidencia en España incluyen factores como el tabaquismo y el envejecimiento poblacional, pero los avances en terapias dirigidas e inmunoterapia han duplicado las tasas de supervivencia en los últimos 40 años.

Diversas iniciativas están en marcha para mejorar la calidad de vida de estos supervivientes. Esto incluye la atención integral, que abarca no solo las secuelas físicas, sino también las emocionales y psicológicas. La psicooncología se presenta como una herramienta fundamental en este proceso, ayudando a los pacientes a gestionar las complejidades que acompañan a un diagnóstico de cáncer. Tania Estapé, psicóloga clínica y coordinadora de psicooncología de FEFOC, subraya la importancia de una atención psicológica desde las etapas iniciales de la enfermedad, proporcionando un apoyo necesario que puede marcar la diferencia en la experiencia del paciente.

Frente a estos desafíos, el acceso a un enfoque multidisciplinario se vuelve aun más relevante. Gaspar enfatiza que es esencial contar con equipos que integren oncólogos, neumólogos, psicólogos y otros especialistas para ofrecer una atención que no solo se centre en la enfermedad, sino también en el bienestar general del paciente. Este enfoque puede ayudar a mejorar profundamente la experiencia del tratamiento y la recuperación.

Finalmente, es fundamental la colaboración entre supervivientes, profesionales de la salud y legisladores para desarrollar un sistema de atención que responda a las diversas necesidades de los pacientes. Tal como concluye Barragán, "lo que buscamos es que los pacientes puedan vivir con dignidad y con las herramientas necesarias para enfrentar el futuro con esperanza, sin barreras sociales o laborales".