Carlos López-Otín, nacido en Sabiñánigo en 1958, es un destacado científico que se mueve con facilidad entre el mundo de las letras y las ciencias. Su pasión por la biología se complementa con un profundo amor por la literatura, lo que le permite explicar complejos conceptos científicos con un toque poético.

En una reciente entrevista, López-Otín afirmó: "La herencia y la identidad de lo que somos están en cuatro letras, pero 3.000 millones de veces en cada una de nuestras células. Eso da para construir los 8.000 millones de seres humanos que estamos hoy aquí; todos distintos". Esta reflexión pone de manifiesto la complejidad y la belleza de la vida humana, enfatizando la singularidad de cada individuo.

López-Otín también ha expresado su opinión sobre la inmortalidad y el significado de la vida. Según él, alcanzar los 100 años ya es un logro extraordinario y un verdadero milagro de la naturaleza. "No hace falta ser inmortales; vivir plenamente y aprovechar cada momento es lo que realmente cuenta", subrayó.

Su trabajo ha sido fundamental en el estudio del envejecimiento y el cáncer, áreas donde ha realizado importantes contribuciones. Además, es autor de múltiples libros y artículos que buscan acercar la ciencia al público, demostrando que el conocimiento puede ser accesible y fascinante. Su enfoque poético hacia la biología ha inspirado a muchas personas a interesarse en la ciencia y a comprender mejor el mundo que nos rodea.

La capacidad de López-Otín para conectar con su audiencia, combinando rigor científico con una prosa lírica, lo posiciona como una de las figuras más relevantes en la divulgación científica en España y más allá.