El Black Friday, un evento que muchos esperan para hacer compras de electrónica y electrodomésticos, en realidad puede ser una trampa para el consumidor. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), muchos de los descuentos que se publicitan son simplemente ilusiones. Aunque parece que puedes ahorrar una gran cantidad de dinero, lo cierto es que podrías terminar pagando lo mismo o incluso más que si hubieras comprado el artículo antes del Black Friday.

La OCU realizó un análisis que revela que el 42% de los productos en estas categorías han visto aumentos de precio en comparación con los mínimos establecidos entre septiembre y octubre. Solo el 29% de los productos han bajado de precio durante esta campaña comercial. Este estudio abarcó más de 12,800 artículos de electrónica y electrodomésticos en 54 páginas web desde septiembre pasado, con la sorpresa de que solo ocho de estas páginas ofrecieron verdaderas rebajas.

Los productos que más comúnmente presentan descuentos son los portátiles, televisores, robots aspiradores y auriculares, con un descuento medio del 8%. Sin embargo, si buscas verdaderos chollos, debes fijarte en robots de cocina, cafeteras espresso y televisores, que fueron donde se encontraron las mayores ofertas verdaderas.

Por otro lado, las subidas de precios han sido dramáticas. Los productos que incrementaron su precio han visto un aumento medio del 13%, en algunos casos alcanzando picos de hasta el 30%. Esto afecta principalmente a artículos como pulseras y relojes inteligentes, cámaras de fotos y auriculares.

Es importante también señalar que los descuentos anunciados a menudo no se calculan sobre el precio más bajo de los últimos 30 días, sino que se basan en el precio anterior que resulta más favorable al comercio. Esto podría incluir precios recomendados que rara vez se aplican, lo cual infringe la normativa. Según el artículo 20 de la Ley de Ordenación del Comercio Minorista, cuando se ofrezcan artículos con reducción de precio, el precio anterior debe ser claramente indicado para que el consumidor pueda realizar comparaciones adecuadas. La ley estipula que este precio debe ser el menor que haya estado en vigor para productos idénticos en los 30 días previos.

Así que antes de lanzarte a comprar durante el Black Friday, asegúrate de investigar y comparar precios cuidadosamente. ¡No caigas en la trampa de las falsas rebajas y mantén tu bolsillo a salvo!