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DANA Valencia | ¡Pedro Sánchez y la Generalitat Valenciana en el ojo del huracán! ¿Qué dijo realmente?

2024-11-22

Autor: Francisco

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se dirigió a los medios en La Moncloa el 2 de noviembre después de la reunión del Comité de Crisis, generada por la DANA que devastó varios municipios de Valencia el pasado 29 de octubre. En las redes sociales, han surgido rumores que atribuyen a Sánchez frases como "si necesita ayuda, que la pida", sugiriendo que se refería a la Generalitat Valenciana. Sin embargo, estas citas no fueron pronunciadas por el presidente.

Durante su comparecencia, Sánchez destacó la rápida movilización de recursos, comentando que el Ejecutivo iba a desplegar en las próximas horas un total de 10.000 efectivos, incluyendo 5.000 militares y 5.000 policías nacionales y guardias civiles adicionales. Afirmó que "el Gobierno central está listo para ayudar" y que, si la Comunidad Valenciana necesita más recursos, simplemente debe solicitarlos.

El presidente también remarcó la importancia de que la Comunitat Valenciana pida lo que requiera: "Si necesita más efectivos, maquinaria, financiación o asesoramiento técnico, que lo pida y se lo suministraremos". En esta misma rueda de prensa, Sánchez mencionó que un Consejo de Ministros, programado para el siguiente martes, aprobaría la declaración de 'zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil' para las regiones más impactadas, incluyendo Valencia, Castilla-La Mancha, Andalucía, Cataluña y Aragón.

El 5 de noviembre, el Gobierno oficializó la declaración de zona catastrófica para los territorios afectados por la DANA, poniendo a disposición 10.600 millones en ayudas para la recuperación. Además, el día siguiente se publicó un decreto en el Boletín Oficial del Estado (BOE), lo que marca un hito importante en la respuesta del Gobierno a esta crisis natural.

La situación desencadenada por la DANA ha generado debates intensos, y ahora muchos se preguntan, ¿es suficiente la respuesta del Gobierno? La comunidad afectada observa de cerca cada movimiento, y la presión sobre la Generalitat para actuar rápidamente es palpable.