Morten Wieghorst ha sido oficialmente nombrado como el nuevo seleccionador de Dinamarca, pero su debut se dará como entrenador asistente en el partido contra España, correspondiente a la tercera jornada de la UEFA Nations League. El exfutbolista y entrenador interino desde julio, asumirá esta función tras la marcha de Kasper Hjulmand, quien dejó el cargo después de la Eurocopa.

Wieghorst no estuvo presente en las dos primeras jornadas de la competición debido a problemas de salud mental, específicamente, baja por estrés. La Federación Danesa de Fútbol destacó la seriedad con la que se toman estos temas y la necesidad de dar apoyo a Wieghorst durante su proceso de recuperación. "El estrés afecta a demasiados daneses y es crucial que Morten se sienta tranquilo", publicaron en su comunicado.

Lars Knudsen dirigió exitosamente al equipo durante estas dos primeras jornadas, logrando dos victorias importantes ante Suiza y Serbia, posicionando a Dinamarca como líder en el grupo 4. Antes del partido contra España, se confirmó que Wieghorst está recuperado, aunque su regreso al banquillo se dará de forma gradual como asistente. "Me siento bien y estoy feliz de volver al trabajo", compartió Wieghorst en las declaraciones oficiales.

La gestión de la salud mental en Dinamarca es un tema de creciente atención. Muchos coinciden en que en el país escandinavo hay menos tabú al hablar sobre estos problemas. Personalidades como Mikkel Hansen, exjugador de balonmano, han sufrido bajas por estrés, lo que ha mayorizado la conversación sobre la salud mental tanto en el deporte como en otros ámbitos.

El reconocimiento de estos temas no se limita al fútbol. Figuras políticas como Jakob Ellemann-Jensen han hablado abiertamente sobre sus luchas con el estrés, lo que ha creado un ambiente de mayor comprensión y apoyo social. La psicoterapeuta danesa Hanne A. Petersen señala que la visibilidad de estas problemáticas ofrece una oportunidad de identificación para muchas personas, mientras que la psicóloga española Marina Guirval, residente en Copenhague, observa que en Dinamarca parece haber una mayor disposición para buscar ayuda psicológica, a pesar de que el estigma aún persiste.

Una diferencia notable entre Dinamarca y España es el acceso a la atención psicológica; Dinamarca tiene 54.3 psicólogos por cada 100,000 habitantes, en comparación con solo 5.1 en España. Además, el sistema público danés cubre la mayor parte del costo de las primeras sesiones de terapia, lo que se traduce en un mayor acceso a tratamientos. No obstante, las listas de espera siguen siendo un desafío.

A medida que avanza la conversación sobre salud mental en el ámbito deportivo, el caso de Wieghorst puede abrir un camino para que más atletas reconozcan y hablen sobre sus propios desafíos psicológicos, fortaleciendo así un ambiente donde el autocuidado y la salud mental sean prioridades.