Caos en la Procesión: Un Jueves Santo para olvidar

Un tumulto inesperado sacudió la Procesión de María al Pie de la Cruz el pasado Jueves Santo, cuando un grupo de personas intentó atravesar la ceremonia con botellas de alcohol en mano en la plaza de San Martín. Esta provocación desencadenó una riña entre los asistentes y el grupo disruptivo, obligando a la Policía Nacional a intervenir para restablecer el orden.

La queja de las cofradías: ¡Es inaceptable!

La cofradía de María del Dulce Nombre ha expresado su frustración ante esta escena que se repite año tras año. Desde la junta de gobierno han denunciado este problema de forma reiterada al Ayuntamiento de León, advirtiendo sobre el impacto negativo que esto tiene en la espiritualidad del evento. Las cofradías critican la falta de apoyo policial, afirmando que las jóvenes que participan en la procesión sufren insultos y escupitajos de un grupo que ni respeta ni controla.

Voces del barrio: Una situación insostenible

La Asociación de Vecinos 'León Típico' también se une a la protesta, señalando que los incidentes del Jueves Santo no son más que la punta del iceberg de un problema que padecen cada fin de semana: ruido, suciedad y una sensación de inseguridad que ahoga la convivencia. Para ellos, este descontrol es la norma, no un incidente aislado.

La vida en el Húmedo: Un desafío diario

"Lo que vivimos el Jueves Santo nos indigna, pero es el pan de cada día para nosotros", comentó un representante de 'León Típico'. Los vecinos se sienten invisibles e impotentes ante una situación que parece ignorarse por las autoridades, que minimizan sus quejas describiéndolas como parte de la vida en el centro.

Un momento de esperanza en medio del caos

A pesar de la agitación, también hubo momentos de civilidad y orden. Durante un incidente médico que exigió la intervención de una ambulancia, los miembros de la procesión mostraron cohesión y respeto, apartándose para permitir el paso de los servicios de emergencia, lo que evidenció que a pesar del descontrol, todavía hay espacio para la nobleza en estos eventos.

Una llamada urgente a la acción

La creciente frustración de los vecinos y cofradías del Húmedo requiere una respuesta urgente. Este problema no solo afecta la celebración religiosa, sino que también pone en riesgo la calidad de vida de sus habitantes. Es hora de que las autoridades se tomen en serio las quejas y trabajen en soluciones efectivas para restaurar la paz en uno de los corazones históricos de León.