Salud

¡Descubre la maravilla oculta en tu dieta! Kristen Carley, nutricionista, recomienda consumir sardinas, una de las fuentes más económicas de nutrientes en España

2024-11-26

Autor: Antonio

Las sardinas: un superalimento económico

Las sardinas, junto a otros pescados como el boquerón y la caballa, son considerados por numerosos nutricionistas como uno de los pescados azules más beneficiosos para la salud. La Fundación Española de la Nutrición (FEN) destaca que estos pequeños peces están cargados de proteínas, ácidos grasos omega-3, fósforo, selenio, vitamina B12, niacina, y vitaminas B6, riboflavina y D. Según la doctora Kristen Carley, las sardinas también representan una excelente fuente de calcio, lo que las convierte en un alimento casi completo que puede cubrir todas las necesidades nutricionales diarias recomendadas para nuestra salud.

La sardina: un bote de calcio en tu mesa

Lo maravilloso de las sardinas es su tamaño. Al ser tan pequeñas, generalmente se consumen enteras, incluyendo sus espinas. Este es un punto crucial, ya que las espinas son una fuente rica en calcio, un mineral esencial que nuestro cuerpo necesita para mantener huesos y tejidos saludables, especialmente crítico durante la menopausia. Además de su papel en la salud ósea, el calcio es fundamental para la contracción cardíaca, la coagulación de la sangre, y también regula la liberación hormonal.

Si bien hay múltiples fuentes de calcio como la leche, el queso, los frutos secos y las semillas, sorprendentemente, las sardinas enlatadas son las que más calcio aportan, superando incluso a las frescas, con hasta 340 mg de calcio por cada 100 gramos. ¡Una razón más para incluirlas en tu dieta!

¿Sabías que la vitamina D es clave para tu salud?

Las sardinas no solo son ricas en calcio, sino que también son una excelente fuente de vitamina D. Esta vitamina liposoluble es vital para mejorar la absorción de calcio en nuestros huesos a nivel intestinal y juega un papel importante en la formación muscular. Además, tiene una conexión directa con nuestro sistema inmunológico, ya que muchas de las células que constituyen nuestra defensa tienen receptores para esta vitamina.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que, a diferencia de otras vitaminas, un 90% de la formación de vitamina D en nuestro cuerpo no proviene de la ingesta alimentaria, sino de la exposición al sol. Por ello, la suplementación puede ser crucial, especialmente en épocas de poco sol.

¡Y no te olvides del omega-3!

Las sardinas son también ricas en ácidos grasos omega-3, que son conocidos como “la grasa del cerebro”. Este nutriente es fundamental para prevenir el deterioro cognitivo, mejorando nuestras capacidades de aprendizaje, memoria, bienestar cognitivo y el flujo sanguíneo cerebral. La nutricionista Marta Marcé subraya la importancia de los omega-3 para mantener nuestro cerebro en plena forma a medida que envejecemos.

Conclusión

En resumen, incluir sardinas en tu dieta no solo es económico, sino que es una decisión inteligente para cuidar tu salud. ¡No dejes pasar la oportunidad de beneficiarte de todos sus nutrientes y mejora tu alimentación hoy!